Si ayer numerosos amigos, como Lolita Flores o Emma Suárez, acudían al Tanatorio Norte nada más conocer el fallecimiento de Enrique San Francisco a causa de una neumonía bilateral, hoy la capilla ardiente del inolvidable actor ha sido un goteo constante de rostros conocidos que, muy afectados, han acudido a dar su último adiós al humorista.
Beatriz Rico, muy amiga del intérprete, confesaba emocionada que «no nos esperábamos su fallecimiento porque estaba mejorando. Desde hacía casi tres semanas estaba fuera de peligro y este fin de semana pues estaba muy flojito. Era una neumonía por una bacteria y bueno, pues empeoró y ya está. Estaba muy flojito, pero no nos esperábamos esto». Rota, la actriz desvelaba como le recordará: «Los que le queremos lo recordaremos pues como siempre, un tío muy divertido y que siempre quería hacer la vida más feliz a los que tenía al lado. Estaba siempre de cachondeo y así le queremos recordar».
Pipi Estrada, que tenía una estrecha relación con el actor desde hace 20 años, señalaba afectado que «la materia se va pero el espíritu siempre queda y hay una cosa para mi muy importante, que los recuerdos nunca mueren y los grandes no mueren, descansan». «Era muy espontaneo. Era políticamente incorrecto, pero era su nobleza, era su esencia, su forma de vivir, su forma de ser…», ha destacado de un Enrique al que nunca olvidará.
Pablo Motos, que mantenía una estrecha amistad con el intérprete y que anoche le despidió emocionado en El Hormiguero, ha acudido destrozado al tanatorio acompañado por su mujer, Laura Llopis. Sin poder contener las lágrimas, el presentador ha confesado que «estamos desolados, estamos hechos polvo y bueno, era el más grande. Ha vivido como ha querido y estoy muy orgulloso de él, he aprendido muchísimo de él y todos le queríamos mucho. Está la sala llena de amor y de cariño por un tío único y pasará mucho tiempo hasta que haya otro tan auténtico como él. Éramos como hermanos, él era el gamberro y yo el que siempre se llevaba las collejas pero sí, aprendí mucho de él y lo pasamos muy bien juntos. Gracias a todos».
Además, hemos podido ver a otros rostros conocidos como María Barranco, Gabino Diego, Adolfo Suárez Illana o Richy Castellanos, que se han acercado a dar su último adiós al inolvidable actor.
Francisco y Cayetano Rivera estarían, 36 años después del fallecimiento de Paquirri, a punto de recuperar los enseres personales que su padre les dejó en herencia y que, supuestamente, siguen en poder de Isabel Pantoja casi cuatro décadas después. Los hijos de Carmina Ordóñez, que reactivaron su lucha para conseguir los objetos y trajes del malogrado torero después de que su hermano Kiko confesase que los había visto en una habitación de Cantora, podrían lograr pronto su objetivo.
Y es que, según han publicado diferentes medios, Isabel Pantoja habría dado orden a sus abogados para que negociasen en su nombre con el letrado de los hermanos Rivera Ordóñez, Joaquín Moeckel, de cara a llegar a un acuerdo que satisfaga a todas las partes. La tonadillera, en una encrucijada sin salida, querría evitar a toda costa una demanda de los hijos de Paquirri y habría mostrado su voluntad de entregarles algunos enseres personales del torero.
Una gran noticia para Francisco y Cayetano, sobre la que sin embargo el mayor de los hermanos prefiere no pronunciarse. Así, cuando le preguntamos por dichas negociaciones a su llegada a la capital, el marido de Lourdes Montes confiesa «no tengo nada que deciros, de verdad. Sigo en mi línea de no tener nada que contar».
Más serio de lo normal y sin tirar de ironía como suele hacer cuando le preguntamos por Isabel Pantoja, Francisco desvela que el motivo de su desazón: «Estoy muy triste. Se ha ido un amigo mío ayer que es Quique San Francisco y no tengo el cuerpo para tonterías ¿sabes? Así que perdonarme pero no tengo yo muchas ganas hoy de todas estas cositas».
El ex diestro mantenía una buena amistad con el actor y suya fue la última entrevista de Quique – que fallecía ayer al no poder superar una neumonía bilateral – concedió en televisión hace un par de meses, en la que hablaba del miedo y la incertidumbre que le provocaba el Coronavirus. Sin embargo, bastante afectado, prefiere no comentar nada sobre el inesperado fallecimiento del mítico intérprete.