Si por algo se ha caracterizado la familia real, más allá de mostrarse protocolariamente correctos en cada una de sus apariciones públicas, es por esos escasos momentos en los que sacan su verdadera personalidad a relucir.
Y es que desde el rey Juan Carlos, hasta la princesa Leonor, todos nos han enseñado que comparten un carácter muy fuerte. Tanto, que a veces no pueden contenerse ni siquiera en público, y son precisamente esos los instantes que tanto disfrutamos. A continuación, te detallamos esos inolvidables momentos en los que los miembros de la familia real han perdido los papeles. ¡Seguro que te acuerdas de más de uno!
2El tremendo muletazo del emérito a su asistente
> Pero, el ‘¿por qué no te callas?’ no es el único momento en que don Juan Carlos sacó su carácter a relucir, sino que en otras ocasiones ya pudimos ver el desprecio que manifiesta hacia sus más allegados. De hecho, los desplantes a su mujer, la reina Sofía han sido constantes. Empezando por el momento en que rechazó su brazo públicamente, o según contaba Pilar Eyre llegaba a susurrarle en una ocasión: «¡Qué me sueltes coño!»
Además, los testimonios acerca de su complicado temperamento, y el mal trato que le daba a sus subordinados, han sido constantes durante años. Por ejemplo, el momento en que dio un manotazo a su chófer, o cuando las cámaras lograron captar como el emérito le tiraba de malas formas las muletas a uno de sus asistentes, el cual no conseguía recogerlas a tiempo.
Y es que parece que el emérito no tolera la ineficiencia en el servicio que tiene a su cargo. Y, según relataba Pilar Eyre, más de uno de sus subordinados ha terminado renunciado tras cansarse de los continuas faltas de educación y respeto. Además, su majestad tampoco dudaba en tomarla contra los medios de comunicación: «lo que queréis es matarme, ponerme un pino en la tripa todos los días en la prensa». Después de ese enfado, los periodistas no gráficos fueron vetados por la Casa Real de los actos oficiales.
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