Iker Jiménez y su mujer, Carmen Porter, se han convertido en los lideres de la pequeña pantalla gracias a Cuarto Milenio, uno de los pocos programas que se atreve a indagar dentro de lo oculto, lo extraño y paranormal.
Además, han pasado a ocupar todas las portadas después de ser los primeros que se atrevieron a advertir sobre el peligro que suponía el COVID19, cuando nada hacía presagiar lo que estábamos a punto de vivir. Y lo cierto es que debido a sus polémicas revelaciones, el periodista se encontró en la complicada tesitura de perder su programa, aunque finalmente ha sido incluso galardonado por su gran labor informativa, la cual ha ayudado a arrojar un poco de luz sobre este tema tan preocupante del que todavía sabemos tan poco.
Pero, ¿qué se esconde detrás de Iker Jiménez? ¿Él también tiene una parte oculta? En Cotilleo.es nos hemos puesto manos a la obra para descubrir el lado más oculto de uno de los reyes del misterio.
3El momento en el que Iker casi pierde su programa
> A pesar de que Iker Jiménez se ha posicionado como uno de los principales informadores, e incluso el más fiable, acerca de la pandemia del COVID19, este asunto casi le cuesta uno de los peores disgustos de su vida. Y es que el maestro del misterio casi se queda sin programa.
Todo ocurría a finales de marzo, cuando aún desconocíamos la que nos estaba por caer encima. Sin embargo, en Cuarto Milenio ya se habían atrevido a avecinar sobre el peligro de un virus que poco tiempo después nos cambiaría la vida para siempre. Así, de forma inesperada, el programa paralizaba sus grabaciones tras 15 años en antena. ¿El motivo? «Las circunstancias televisivas son complicadas», en palabras de Iker Jiménez.
«La determinación de terminar Cuarto Milenio fue hecha pensando, les aseguro, que no en el descalabro económico evidente que uno tiene, sino en la salud de mi propio equipo. Y ustedes dirán, ‘bueno Iker, ¿por qué estás aquí otra vez?’ Pensábamos que esto iba a ir a mejor y estamos con bastante inquietud, pero sabemos que tenemos que cumplir un servicio con ustedes», explicaba el periodista a su audiencia. «¿El futuro? Dios dirá. Ya veremos lo que pasa, sea donde sea vamos a seguir contándoles la verdad nos dé palos la izquierda, la derecha, el centro o el medio volante, nos da exactamente igual», añadía con una clara indirecta al panorama político y dando a entender que el responsable de que Cuarto Milenio echase el cierre no es otro que el Gobierno.
De todas formas, el programa volvía con más fuerza que nunca en septiembre, y lo hacía centrándose y ofreciendo datos reveladores acerca de un virus del que todavía sabemos muy poco.
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