La ruptura de Juan José Ballesta y Verónica Rebollo después de 15 años de amor, ha sido todo un bombazo. Juanjo y Vero eran de esas parejas que siempre han caído bien y han simpatizado con el público. Comenzaban su historia de amor y ahora se ha truncado. La pareja lo dejaba hace tres meses y él lo hacía público.
Pero, ¿qué ha pasado con la pareja? ¿Qué ha sucedido para que el amor se les rompiera? En Cotilleo.es en exclusiva hemos hablado con la otra parte implicada para ver qué ha sucedido, cómo están las cosas realmente, entre ellos, y qué le ha parecido la detención de su Juan José Ballesta.
2¿Por qué han roto Juan José Ballesta y Verónica Rebollo?
> Eran una pareja que iban a todas los sitios juntos y que sus apariciones eran contadas al vivir en el pueblo de Carranque. «No sé qué ha pasado la verdad… Han sido muchos años«, explica afligida. «Pero, es verdad que nos queremos mucho. Hay mucho cariño entre los dos. Seguimos llevándonos muy bien… No sé lo que pasará, la verdad»… Este no sé, ¿puede suponer una vuelta? Vero habla y lo puedes leer a continuación.
«Juanjito, que no Juanito», aclara y precisa, porque muchos «creen que es Juanito y no es Juanjito, de Juanjo como el padre», lo está pasando bien a su entender, por lo menos de momento. «No sé. Lo está llevando bien. Pero a lo mejor ya sabes, piensan una cosa y luego a lo mejor te expresan otra. Pero le veo bien, como tenemos buena relación y quedamos los tres juntos a veces.
Vero ha salido de la casa por iniciativa propia porque ella ha encontrado trabajo en Parla. Y Juanjo con su hijo Juanjito se han quedado allí en Carranque (Toledo) donde vivían. Y es que la que fuera pareja del famoso actor tenía más dificultad de encontrar trabajo allí. A esto se le suma la dificultad de comunicación con el transporte.
La mujer de Juan José Ballesta no dejaba a su chico por haber encontrado un trabajo. Vero se iba con una mano delante y con una detrás como aquel que dice cuando tomaba la determinación. Rebollo no había trabajado en su vida: «El trabajo lo encontré después. En 15 días. Tuve mucha suerte. Nunca he trabajado. Cuando llegó nuestro hijo, me centré en él. Ahora que es más grande. Es la primera vez que trabajo«.
Vero ha tenido que renunciar a su hijo. Sigue leyendo y te contamos por qué.
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