Kiko Rivera se ha enfrentado a la entrevista más complicada de su vida pública. El hijo de la tonadillera está dispuesto a todo para ganarse el favor del público, y se ha sentado en Domingo deluxe para continuar destripando a su familia. La peor parada ha sido Isabel Pantoja, quien no logra recuperarse del dolor que siente al ver a Kiko vendiendo sus intimidades al mejor postor. El pequeño del alma ha estado muy nervioso durante toda su intervención. Pero, su estado de ánimo, no le ha impedido seguir bombardeando la reputación de la artista. Horas antes de ser entrevistado por Jorge Javier Vázquez, ha compartido una fotografía en su Instagram con un mensaje muy revelador, ¿Quieren conocer de qué se trata? Te contamos la última hora de la batalla mediática de los Pantoja.
1El público se echa encima de Kiko Rivera antes de su comprometida entrevista
> Kiko Rivera está dispuesto a acabar con su madre. Según cuenta, la cantante le debe tres millones de euros y, si él quisiera, podría volver a enviarla a la cárcel. Durante las cuatro horas y media que ha durado su entrevista en Domingo deluxe, ha tenido un objetivo claro: convertirse en víctima de la batalla familiar. Sin embargo, gran parte del público, no perdona su atrevimiento. “Espero que te hayan pagado bien por este destrozo”, le comentan en una fotografía que ha publicado antes de sentarse con Jorge Javier Vázquez. El hijo de la tonadillera se mostraba bastante optimista en Instagram: “Comienza tu día con una sonrisa”. Los espectadores no se han tomado demasiado bien este descaro, y le han atacado cruelmente.
“Habla también de los cuernos que le has puesto a tu queridísima Irene”, le reta un internauta. Sin embargo, Kiko Rivera ya tenía muy claro su discurso, y Jorge Javier se ha mostrado muy sorprendido por la actitud de su invitado. Según se ha contado, Irene no estaba de acuerdo con esta entrevista. Pero, el pequeño del alma, no va a parar hasta terminar con sus peligrosos enemigos: Agustín e Isabel. Lo más suave que ha contado es que Pantoja le prohibió tener relación con su familia paterna. «Me ha dicho palabras muy feas, sobre todo de Francisco«, asegura. Según cuenta, la tonadillera tampoco habla bien de su sobrina, Anabel Pantoja: «mi madre y mi tío se han burlado del peso de mi prima».
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