A pesar de haber vivido al margen del foco mediático en los últimos años, Zayra Gutiérrez se ha convertido en un rostro conocido más de la crónica social por su desafortunado comportamiento durante la pandemia de la Covid-19. Y, aunque la joven pidió perdón por su actitud irresponsable ante esta crisis sanitaria, unos audios que no dejaba en buen lugar a su madre volvieron a situarla en el punto de mira.
En esta ocasión, la joven dejó de lado las posibles rencillas con su madre para celebrar el 19 cumpleaños de su hermano Aitor, una discreta celebración familiar en la que aparentemente demostraron tener una muy buena complicidad. Sus continuas salidas nocturnas, su grupo de amigos o su alto nivel de vida, a pesar de no tener un trabajo estable, han hecho que la vida de la hija de Arantxa y Guti se convierta en un tema de debate.
Además del cumpleañero y la propia Zayra, Arantxa de Benito acudió a la cita junto a su madre y su novio Jairo con el que demostró tener una relación más que consolidada. Sin duda alguna, él ha sido uno de los grandes apoyos para la empresaria en estas duras semanas en las que se ha indagado sobre la vida de su hija y la relación que mantienen ambas.
Muy divertidas y cogidas del brazo, madre e hija salieron del restaurante volviendo a casa en coches separados. Y, mientras que Aitor se sentó al volante de un coche de alta gama con su hermana Zayra como copiloto, Arantxa se marchó en otro coche junto a su pareja y su madre.
Fue Jairo el que estuvo pendiente de la madre de su pareja en todo momento, la empresaria reconoció que las cosas con su hija están mucho más tranquilas. «Un poquito más tranquilo todo, gracias» sentenció cuando le preguntaron al respecto. En cuanto a la edad de su otro hijo, matizó: «Un hombre ya».
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