El DJ mantiene su particular y encarnizada guerra contra su madre. De un tiempo a esta parte, el sevillano ha venido revelando los secretos más oscuros y turbios de la tonadillera, esbozando una imagen suya demoledora. Kiko Rivera se mostró especialmente duro en su última entrevista, en el que reveló que la cantante le debe la friolera cantidad de tres millones de euros. Pero, ¿cómo se gestó este reportaje que hundió todavía más a Isabel Pantoja? ¿Quién movió los hilos? Sigue leyendo si quieres descubrir la intrahistoria de uno de los reportajes más polémicos que se han publicado jamás. Te lo contamos todo a continuación.
3La unión familiar de Kiko Rivera y Narcís Rebollo
> Dios los cría y ellos se juntan, y en este caso no ha sido diferente… El presidente de esta importante discográfica mantiene una relación sentimental con Eugenia Martínez de Irujo, la hija de la duquesa de Alba que en su día estuvo casada con Francisco Rivera, el hermano por parte de padre de Kiko Rivera. Fruto de ese matrimonio nació Tana Rivera, sobrina del DJ a la que este adora. De hecho, el cantante no quiso faltar a su puesta de largo, donde coincidió con su excuñada aristócrata. Entre ellos existe una relación muy cordial y parece probable que la duquesa de Montoro diera la cara por el tío de su hija ante Narcís Rebollo para sugerirle que le contratara en la casa de discos.
Para rizar más el rizo, se debe recordar que Isabel Pantoja trabajaba con esa misma compañía hasta hace poco tiempo. Por lo visto, su relación contractual se rompió de forma abrupta por culpa del comportamiento altivo que la tonadillera mostró cuando se le sugirió actuar en salas más pequeñas en lugar de estadios porque ya no ocupaba todas las localidades. La cantante se negó en rotundo, argumentando que una artista de su talla no tenía que verse rebajada a los antros de conciertos, así que la discográfica decidió no renovarle el contrato porque ya no le salía rentable. Entonces, ¿cómo le habrá sentado que su hijo fiche ahora por la empresa que un día le dio la patada? ¿Será esta una de las tantas razones por las que su reconciliación parece ya imposible?