Isabel Sartorius, 30 años marcada por la decisión de la reina Sofía

> Sin embargo, hubo algo que aprendió durante todos esos años de noviazgo que fueron escasamente dos, pero que han parecido que han sido hasta ahora, por decirlo de alguna forma (porque nunca se quitará ese sambenito). Lo que más aprendió Isabel Sartorius fue a hacerse invisible. Se convirtió en la maestra por excelencia del despiste, del salir y entrar sin hacer ruido sin que se la viera, aunque muchas veces era difícil escapar al ojo de los avezados fotógrafos.

Vivía con miedo, con temor a que le preguntaran por la Familia Real y porque se le siguiera a todas partes. Era capaz de permanecer días encerradas en su casa. La enfermedad de su madre fue también un maremagnum.

Las drogas fueron el día a día de Isabel Sartorius en su vida y tuvo que hacerse una cura yendo a un profesional.  Esta cura le llevó a escribir un libro y contar en alto el infierno que había vivido: Por ti lo haría mil veces. En él revelaba la que fue su cruda realidad: la problema drogadicción de su madre. 

Sartorius confesaba que a los 14 años, cuando salía del colegio, iba a comprar cocaína a su madre. Pero aún peor era la relación de codependencia que tenía con su progenitora, algo que incluso llegó a hacerle pensar que estaba loca. Isabel Zorraquín, madre de Sartorius murió en el año 2009. Aquello supuso un mazazo para ella. “Ha sido mi mejor amiga, sigue conmigo, fue una gran madre y víctima de las drogas. Nos dio muchísimo cariño, no hubo un solo día que no nos llamase para decirnos que nos quería”.

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