Isabel Pantoja lleva mucho tiempo encerrada en Cantora. Desde que su hijo, Kiko Rivera, pusiera en duda su papel como madre, la tonadillera ha decidido retirarse de la vida pública. Algunos periodistas aseguran que el regreso de la artista está cada vez más cerca. De cumplirse las condiciones que exige a Telecinco, Isabel estaría a punto de dar la entrevista más difícil de su trayectoria. Sin embargo, parece que la cadena no está dispuesta a aceptar sus requisitos, y Pantoja ha tenido que elaborar una cuidada estrategia para romper su periodo de silencio. Recientemente, la cantante ha reaparecido por todo lo alto, y le ha enviado un mensaje secreto a su hijo que terminado de destrozarle. ¿Quieren saber cuál es el motivo por el que Isabel ha decidido salir del agujero?, ¿Qué estaba haciendo Kiko Rivera mientras su madre le hundía públicamente? Te contamos la última hora de la batalla familiar más famosa de la prensa del corazón.
3La artista hace gala de su carácter censurando sus redes sociales
> Isabel Pantoja está muy orgullosa de que sus fans sigan dando la cara por ella. Aunque, es consciente de que su personaje público levanta muchas pasiones, y no está dispuesta a que nadie más ensucie su imagen. Por este motivo, ha decidido silenciar todos los comentarios de su cuenta de Instagram. Ningún seguidor de la cantante puede expresar su opinión sobre el comportamiento de la tonadillera, pues únicamente ha presumido de su éxito, pero, no tolera que nadie pueda criticarlo. Es cierto que todos los medios de comunicación están de acuerdo en que Isabel Pantoja es una de las grandes voces del país. Sin embargo, la persona que hay detrás de la artista tiene los días contados en la crónica social. Cada vez se dan más detalles que alejan a la tonadillera del gran público, y muy poca gente logra empatizar con ella.
No obstante, el nuevo negocio de Kiko Rivera juega muy a favor de la cantante. La campaña de desprestigio con la que el pequeño del alma pretende solventar sus problemas económicos, ha hecho que el arte de Isabel Pantoja quede por encima de todo. Antes de criticarla, siempre se pone por delante su talento, por lo que las críticas pierden mucha fuerza. Por su parte, Kiko Rivera sufre el castigo contrario: nadie valora sus aptitudes y gran parte del público no perdona lo que le está haciendo a su madre. De esta forma, su último tema, Cicatriz, ha sido un completo fracaso. Pensó que lo mejor para tener más repercusión era sembrar la polémica, y simuló que quemaba una foto de su madre mientras grababa el videoclip. Este gesto se ha vuelto en su contra, pues ha sido considerado una falta de respeto.
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