Ser hijo de un famoso es todo un privilegio. Concursos, entrevistas, exclusivas o colaboraciones, todo vale para ganar dinero mientas se ponga por delante el apellido de la familia. En las últimas semanas la prensa se ha hecho eco de las intenciones de Zayra Gutiérrez por pasar a primera línea mediática. Pero, si echamos la vista atrás, no es la única que ha aprovechado la fama de sus padres para convertirse en protagonista. Hace unos años, algunos rostros conocidos como Tamara Falcó se dieron cuenta de este filón, y no dudaron en aprovechar esta gran oportunidad de ganarse un buen puñado de euros.
Hubo quien intentó imitarla y la jugada no le salió del todo bien, como ha sido el caso de Kiko Rivera. No obstante, nuestro panorama mediático está repleto de hijos de famosos que han conseguido sentarse en el trono televisivo. ¿Saben que las hijas de dos reconocidas tonadilleras se enfrentaron por la fama cuando eran muy pequeñas? Te contamos el drama que al que tienen que hacer frente todos los que desean convertirse en noticia.
3La apuesta que todos fallaron: Alejandra Rubio y Andrea Janeiro
> Andrea Janeiro, hija de Belén Esteban y Jesulín de Ubrique, ha sido la niña más famosa del país. Todos los periodistas apostaban a que iba a continuar con la carrera televisiva que había iniciado su madre, e iba a ser un rostro habitual en los platós de televisión. Sin embargo, nada más cumplir los 18, Andrea se mudó a Londres para escapar de la presión mediática. La hija de Belén recibió ofertas muy jugosas de todas las revistas y programas, pero, rechazó todo para empezar un futuro lejos de la fama de su familia. Justo lo contrario hizo Alejandra Rubio, la hija de Terelu.
Gran parte de los periodistas estaban seguros de que la nieta de María Teresa iba a ganarse la vida fuera de la televisión. El prestigio con el que contaba las Campos, fue suficiente para pensar que Alejandra iba a rechazar el dinero que le ofrecían los periodistas. No obstante, Terelu y su familia no atraviesan un buen momento económico. Así que, la pequeña del clan, se vio obligada a salir en la pequeña pantalla para que el público no perdiera el interés en su apellido. Poco a poco, Alejandra se ha ido sintiendo más cómoda con su trabajo como colaboradora. Y, actualmente, la televisión le permite llevar un ritmo de vida completamente envidiable: vive en un piso de lujo, viste ropa de altas marcas, visita los mejores restaurantes de la ciudad, ¡No le falta de nada! ¿Qué será lo que más envidia Zayra Gutiérrez de la hija de Terelu?
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