El divorcio entre Paloma Cuevas y Enrique Ponce dejó a la opinión pública en shock, pues se ponía fin a una relación de más de 20 años de una vida forjada en común forjada en la lealtad. Han pasado meses desde que esto se confirmara, y la vida de los protagonistas han dado un giro bestial. Adiós a la vida idílica del torero con Ana Soria y a la imagen mustia y de decepción que Paloma Cuevas ha arrastrado desde el principio. La vida de ambos ha sufrido un cambio brutal y a continuación te explicamos el por qué.