Cuando se apagan los focos todo es diferente. Anoche, aunque al final de la entrevista, se caldeó mucho el ambiente, el encuentro entre Kiko Matamoros y Javier Tudela fue de lo más surrealista. Hoy, te desvelamos en este portal lo que se esconde detrás de este inimaginable encuentro entre ambos. Agárrate porque no te lo esperas. ¡Qué comience el juego!
2Un falso y maquillado encuentro
> La noche de ayer en el plató de Sálvame comenzó de la forma más surrealista posible. Con un Kiko Matamoros noble y apenado sentado en el lado de los entrevistadores y un Javier Tudela melancólico en el bando de los entrevistados. “Me da pena, te lo digo honestamente. Le he visto ahí sentado y he estado acordándome de cosas. En un plató te calientas, oyes cosas injustas, cosas que ha dicho de mí que son muy desagradables y su discurso de desprecio, pero está al lado de su madre y lo respeto y comprendo. Le conocí con 4 años y dejé de verlo a los 24. ¡Cómo no lo vas a querer!”, espetó el tertuliano nada más encenderse el piloto rojo.
Unas palabras que llegaron directamente al corazón de Javier Tudela, el mismo que, no dudó en contestar, estando a la altura de la nobleza del actual novio de Marta López. El joven aseguró que fueron muchos los años que Kiko estuvo a su lado y que durante años ha “querido a Kiko Matamoros”. Pero los formalismos quedaron atrás en el momento en el que Kiko nombró a Makoke, asegurando que fue ella la culpable del enfrentamiento entre ambos. Unas palabras que sentaron muy mal al joven y que, como era evidente, no tardó en reprochar.
Algo nada nuevo si tenemos en cuenta los últimos encontronazos que Kiko ha tenido con alguno d ellos familiares o amigos de Makoke. Lo llamativo de todo esto es lo que e esconde detrás de las cámaras. Muy pocos conocen la realidad de este enfrentamiento entre “padre” e “hijo”: las palabras ruina y cárcel tienen mucho que ver. Agárrate porque vienen curvas y de las cerradas.
Siguiente: Ruina y pena de cárcel