Parece mentira, pero hace quince años ya que una jovencísima Chenoa salía en chándal a la puerta de su casa para confirmar su ruptura con David Bisbal. Sin embargo, a lo largo del tiempo ha ido cambiando esa tristeza por una gran confianza en si misma. Así, la hemos visto muy bien acompañada por pretendientes de la talla de Álex González o David de María. Aunque, su final feliz ha terminado llegando de la mano del doctor Miguel Sánchez Encinas, con quien tiene pensado pasar por el altar. Este ha sido el camino de amores y desventuras de la triunfita más polémica de todos los tiempos.
3Su larga lista de fracasos amorosos
> Cuando Chenoa estuvo lista para volver a abrirle las puertas al amor, no fue precisamente al lado de alguien poco conocido, y es que recuperó la ilusión junto a nada más y nada menos que el famoso actor Álex González. Los dos se conocieron durante un cameo en la serie Hospital Central, aunque lo suyo no terminó de funcionar y duró poco más de un año. ¿Los principales motivos de la ruptura? Tal y como asegura la propia Chenoa en su libro, se debió al exceso de atención mediática que ella recibía. «El día de los Goya supe que era el principio del fin. Aquello puso de manifiesto la incapacidad de Álex para aceptar que era el novio de alguien famoso. La relación se convirtió en un reproche continuo, en un no querer salir por si nos veían juntos. Me sentí muy manipulada en aquellas semanas».
Y, entre tanto fracaso amoroso, al fin llegó alguien que sí que la hizo feliz. «Después de David y Álex, por fin alguien vivía en el planeta Tierra y que no se iba a mover de allí», se puede leer al respecto en su libro. «Él era una persona fácil. Sigue siéndolo. Somos grandes amigos hoy en día. Con David Escudero decido que se puede ser feliz. Me ayudó muchísimo a conocerme a mí misma porque lo de las apariencias no iba con él. Me enseñó a tener una vida normal», explicaba.
En su historial, también hubo espacio para un piloto anónimo, otra relación tormentosa que le costó más de un dolor de cabeza a la cantante. «El piloto respondía a todos los tópicos aeronáuticos: se había acostado con toda la flota de azafatas de su compañía», revelaba en Defectos Perfectos. «Y en esas estaba cuando mi querido piloto reaparece, pedrusco de Cartier en mano, pidiéndome, o mejor suplicándome matrimonio, porque todo lo anterior era un error y yo era el amor de su vida».
«Y yo que siempre fui muy romántica, muy de pedidas, dije que sí porque así son los cuentos de hadas. Bueno así, pero sin hijos ajenos de por medio. Yo empecé a darme cuenta de que quizá mi respuesta no era adecuada cuando mis amigos no saltaron de emoción al conocer la noticia. Al final, lo dejé. El piloto fue la última pareja con la que me mimeticé».
Tiempo después, en 2010, también tuvo un breve affaire con el cantante David de María, aunque en esta ocasión no llegaron a pasar del mes. Después, llegaban a su vida Alian Cornejo y Curi Gallardo, aunque con ninguno terminó de cuajar el amor.
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