Isabel Pantoja no gana para disgustos. Pasa sus peores navidades con la única compañía de su madre Ana y su hermano Agustín en Cantora. Nadie ha querido visitarla excepto su hija Isa a su salida de La casa fuerte, en un encuentro exprés. Por su parte, los hermanos Rivera incluido su hijo Kiko, se han tomado la revancha y han unido sus fuerzas para vengarse de la tonadillera en estas fechas tan señaladas. ¿Cómo ha sido esta dulce venganza? ¿Cuál será la reacción de la Pantoja al ver tales faltas de respeto de aquellos que algún día la quisieron? Sus hijos no soportan la situación y están dispuestos a hacer todo lo posible por que su madre recapacite. Sigue leyendo te contamos todos los detalles a continuación.
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HERMANOS RIVERA from Bi M on Vimeo.
> El día de Navidad han decidido pasarlo juntos. Una comida familiar en un restaurante donde los hermanos Rivera han disfrutado junto a sus mujeres e hijos. Todos juntos en amor y compañía, pocas veces hemos podido ver esta estampa. En un año en el que les hemos visto más unidos que nunca, una celebración como esta no podía faltar. Tampoco lo podía hacer un vídeo que Francisco Rivera ha subido a su perfil de Instagram. En él mete la pullita diciendo que lo importante es pasar la Navidad en familia. También celebrar el nacimiento de Jesús. Este zasca va directo al corazón de Isabel Pantoja, quien no ha podido defenderse ante tal ataque.
Al final de este clip, salen las cuñadas de los Rivera: Lourdes Montes, Irene Rosales y Eva González saludan, con sus hijos en brazos, incluido el niño de Kiko que tuvo con Jessica Bueno, aunque la verdad, muy poco animadas. Allí estaban todas juntas, aunque en el pasado se ha llegado a especular con que su relación no era muy estrecha y hasta se llevaban mal. Una aparición tan fugaz que los hermanos tomaron todo el protagonismo haciendo quedar a estas en segundo plano. Aunque fue suficiente para que Isabel Pantoja se diera cuenta de que todos disfrutaban del convite sin que ella fuera invitada. Las navidades de los hijos de Paquirri están siendo dulces, sin embargo, siempre tienen en la memoria su guerra en los juzgados con la tonadillera, que lejos de resolverse, aun queda herencia «envenenada» para rato, pues la protagonista no dará su brazo a torcer tan fácilmente y menos ahora.
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