Alejandra Rubio es la pequeña del clan Campos, pero está dispuesta a hacer que su nombre suene con más fuerza que el del resto de su familia. Desde que empezó a trabajar en televisión, demostró ser un personaje con personalidad suficiente para hacer frente a todos sus problemas. La nieta de María Teresa genera su propio contenido: misteriosas rupturas sentimentales, supuestos romances con polémicos colaboradores, enfados públicos con tras famosas y, su tema estrella, ¡Enfrentamientos con su propia familia! Alejandra está decidida a desvincularse la carga mediática que implica el apellido de su madre. Para conseguir su objetivo no ha dudado en cometer una terrible traición, ¿Pueden imaginarse de que se trata?
1La hija de Terelu está dispuesta a ser la Campos más famosa
> Terelu Campos aprovechó la mayoría de edad de su hija para presentarla en sociedad en la revista Hola. Los medios de comunicación se empezaron a interesar por Alejandra Rubio, una discreta niña que prometía marcar historia en el mundo de la moda. Aseguró que no tenía intención de seguir los pasos de su familia, y no iba a entrar a formar parte de la farándula. Esta declaración de intenciones llamó la atención de muchos periodistas, pues curiosamente lo estaba anunciando en una de las publicaciones de referencia para la crónica rosa. La nieta de María Teresa se mostró muy orgullosa del recorrido mediático del clan, pero garantizó que su futuro profesional era muy diferente. Durante un breve periodo de tiempo, demostró que sus palabras eran sinceras. Pero, nada más ser tentada por un programa de televisión, cambió de opinión, dándole la razón a todos los que aseguraban que la pequeña estaba hambrienta de fama.
Su primera aparición televisiva se produjo hace dos años, en 2018. Lo hizo en un programa que Mediaset maneja a través de una plataforma digital y, en su día, tuvo muy buena acogida: Morning Glory. En esta primera toma de contacto con el medio, siguió manteniendo que iba a formarse para convertirse en diseñadora. Pero, según ella, de nada servía su talento si no se daba a conocer. Y lo cierto es que cumplió con su objetivo, pues muchas revistas recogieron las declaraciones de la hija de Terelu. “Voy todos los martes al psicólogo”, dijo causando un gran revuelo. Alejandra empezó así a ocupar muchas portadas y ser protagonista de algunos programas de corazón. Los tertulianos empezaron a hablar de su vida privada, y lo cierto es que a los espectadores les resultó muy interesante.
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