A punto de cumplirse un año desde que Edmundo Arrocet y María Teresa Campos anunciaran su ruptura, todo el mundo se hace la misma pregunta. ¿Qué es de Edmundo? ¿Dónde está? ¿Qué hace con su vida?. Viva la Vida, el programa donde colabora el clan de las Campos, formado por Terelu Campos, Carmen Borrego y ahora Alejandra Rubio, le ha localizado. Y además de descubrir algunos detalles sobre la nueva vida de Bigote, él mismo, ha mandado un mensaje oculto para las hijas de su expareja María Teresa. Si quieres saber qué es lo que ha dicho exactamente y a qué se dedica actualmente sigue leyendo que tenemos todos los detalles para que no se te quede nada en el tintero.
4La reacción de Alejandra Rubio y Carmen Borrego
> Carmen Borrego y Alejandra Rubio no se esperaban que las declaraciones ante los medios que Edmundo Arrocet daría irían directamente a rebotar en sus carnes. Una profunda desilusión, la confusión y el malestar interior les invadía rápidamente a las dos miembros del clan Campos que estaban en plató. «¿Qué pasa que esperabais otra cosa?», les preguntaba Emma ante las caras largas que mostraban ambas. Ante la estupefacción de que mandara un mensaje directo hacia ellas o su familia, Edmundo quiso referirse en esta ocasión a todos los miembros del programa, y en especial a Emma García.
Carmen Borrego manifestó que sí esperaba otra cosa, algo más personal, pues el mensaje para ella, estaba pronunciado en realidad en honor a la presentadora del programa. Alejandra Rubio por su parte, afirmaba: «Pensaba que nos iba a felicitar la Navidad». Pronto vinieron las risas de sus compañeros y los agradecimientos al humorista. Pues Diego Arrabal puso el toque de humor con cierto recelo a que lo que Carmen Borrego esperaba era algo para poder dar su próxima exclusiva antes de que el año llegara a su fin. Parece que Edmundo, por ahora, no tendría en mente ni reconciliación ni palabras de arrepentimiento para ellas. Bigote estaría dispuesto a olvidar todo lo vivido con la que fuera la reina de las mañanas en televisión: María Teresa Campos, dejándola desolada.
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