No está siendo un año fácil para la monarquía, que atraviesa por una profunda crisis a raíz de los escándalos del rey Juan Carlos que han salpicado a toda la institución. Son muchos los quebraderos de cabeza a los que los reyes Felipe y Letizia tienen que hacer frente, incluidas los problemas familiares. La consorte tiene al enemigo en casa y sus congéneres de Asturias no han hablado muy bien de ella… ¡Es lo que faltaba! ¿Quieres saber qué ha pasado y enterarte de todo? Sigue leyendo, te lo contamos todo a continuación.
3La corrupción de Zarzuela y el aborto de la reina Letizia
> La hermana del padre de la consorte nunca ha disimulado su vena republicana y no se muerde la lengua a la hora de cargar contra la Corona públicamente. Así lo hizo cuando se destaparon los escándalos del rey Juan Carlos y el rey Felipe renunció a su herencia. Henar Ortiz compartió en sus redes sociales una serie de mensajes en los que dejaba clara su repulsa a este comportamiento, además de un manifiesto en el que abordaba el asunto de la corrupción en Zarzuela.
“Comisiones ilegales millonarias, propiedades ocultas en el extranjero, amnistía fiscal, cacerías de elefantes, amistades peligrosas, caso Nóos… Son solo algunas de las noticias que han rodeado a la monarquía española en los últimos años. Todo apunta a que los Borbones se han enriquecido a costa del pueblo español desde el final de la dictadura. Algo que sigue sucediendo en la actualidad, tras la abdicación y la renuncia a la actividad pública de Juan Carlos I, que continúa disfrutando de un estatus especial financiado con los Presupuestos Generales del Estado”, se quejaba Henar Ortiz.
Pero el que fue más lejos fue David Rocasolano, el primo de la reina Letizia que en su día también gestionó sus asuntos legales. El abogado publicó Adiós Princesa, un libro incendiario en el que no dejó en muy buen lugar la figura de la consorte. Entre las páginas de su obra revela incluso que la asturiana se sometió a un aborto voluntario antes de conocer al rey Felipe VI, y que le pidió el favor de eliminar todo rastro de aquel procedimiento de la clínica para que no se filtrara a la prensa. Por lo visto, si la reina Sofía se hubiera enterado antes de la boda real, nunca hubiera permitido ese matrimonio, puesto que se trata de una mujer con fuertes creencias religiosas.