Chelo García-Cortés ha sido una de las mejores amigas y confidentes de Isabel Pantoja y de sus hijos Kiko e Isa. Por estar pendiente de la niña y proteger a esta última salió por la puerta grande de Cantora y del lado de la tonadillera. Lo consideró alta traición. Y todo porque sabía como era la niña y para tenerla más recogida en su alocada juventud, decidió convertirse en su confidente y en dejarla un sitio en su propia casa para estar con su noviete…
Sin pregunta alguna y sin saber por qué lo había hecho, Chelo se encontró con una patada en el culo…