Sandra Barneda es una de las presentadoras más habituales de Telecinco. Desde que trabajó con Jordi González copresentando La Noria, su trayectoria profesional dentro de Mediaset no ha parado de crecer. Sandra también triunfa como escritora. Recientemente ha sido galardonada con un premio de 150.250 euros por su novela Un océano para llegar a ti. Está muy bien valorada por la crítica y por los lectores, nadie duda del talento de la periodista. Pero, en su faceta como presentadora, no tiene tanta suerte. A pesar de haberse hecho con una infinidad de programas de la parrilla de Telecinco, el público está cansado de su presencia. Tras conocerse la noticia de que iba a sustituir a Emma García durante su baja en Viva la vida, las redes ardían manifestando su deseo de que fuera Toñi Moreno la que ocupara el puesto. ¿Por qué Sandra no es tan querida por los espectadores?
3El conflicto con Telecinco y su año sin trabajo
> Al igual que le habría ocurrido a su compañero y amigo Jordi González, la cadena no encontraba ningún proyecto para Sandra. Sin embargo, la escritora, contaría con el inconveniente añadido de poseer un carácter criticado por muchos de sus compañeros. La revista LOC llevaba a sus páginas unas declaraciones de Bulldog, productora para la que trabaja Barneda, que no le sentaron muy bien. “No es fácil trabajar con ella porque es demasiado exigente”. Por ese motivo, desde que presentó el Debate de Supervivientes 2019 no regresó a la pequeña pantalla hasta 2020, gracias a La isla de las tentaciones.
Al parecer, Sandra tenía menos audiencia que el resto de sus compañeros. Lo que generó en ella una inseguridad que agrió su carácter e impedía que el equipo funcionara con normalidad. “Siempre intentaba aportar muchas ideas. Sobrepasaba sus límites y cuestiona el trabajo de los directores”. A pesar de ello, la catalana no tardó en desmentir su mala relación con la cadena a través de Twitter. “Sigo en Mediaset, y cuando quieran estaré para ellos”, escribió para zanjar la polémica. Algo parecido hizo cuando trabajó por primera vez con Jorge Javier Vázquez. Mucho se había publicado sobre los conflictos internos entre ambos. Por ello, nada más coincidir en plató, Sandra le dijo: “Te admiro mucho. Que la gente sepa que no hay problemas”. ¿Fueron sinceras sus palabras o solo pretendía trabajar más a gusto?
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