Hacer un bizcocho casero con éxito no tiene punto de comparación con cualquier versión industrial, son auténticas delicias culinarias. Pero conseguir el punto exacto no resulta tan sencillo, y en muchas ocasiones puede ocurrir que tu receta quede seca, quemada o demasiado insípida. Hoy te vamos a mostrar cómo hacer un bizcocho tan esponjoso que parezca un flan ¡y sin salir de tu cocina!
3La preparación
Primero se vacía el yogur en un pequeño bol, podrás utilizar su recipiente para medir de las cantidades de los ingredientes. Se precalienta el horno a 180º durante 10 minutos, mientras se puede elaborar la masa. En un bol grande se añaden las dos medidas de azúcar y los huevos y se baten enérgicamente con un batidor de varillas.
Se añade el aceite y el yogur y se sigue batiendo para que la mezcla quede homogénea y sin grumos. Después, se pone un colador justo encima del bol y se van añadiendo la levadura y la harina de forma que pasen por él, es decir, se utiliza la técnica del tamizado. Se termina de mezclar todo para que queden perfectamente integrados todos los ingredientes.