María Pombo está atravesando por uno de los momentos más intensos y especiales de su vida. Embarazada de siete meses, la influencer acaba de confesar que lleva un año acudiendo al psiquiatra – pese a considerarse una privilegiada – para sobrellevar y aceptar la presión que sufre por parte de sus haters y sus seguidores en redes sociales. Aún así, lo bueno siempre se impone y la modelo está disfrutando plenamente de su embarazo, muy deseado.
Hace escasas horas, María acudía con su marido, Pablo Castellano, a una revisión ginecológica e, ilusionada, ha contado a sus seguidores que su bebé, Martín, está perfecto y ha mostrado las nueva ecografías del pequeño, en el que se le ve con mucha claridad.
Y ahora, cuando acaba de entrar en la semana 28 de embarazo, por fin vemos a una de las influencer más populares del país, presumir de embarazo. Y es que si a muchas de nuestras celebrities se les nota la tripita desde el primer momento – como por ejemplo, a Paula Echevarría – a María ha tardado en salirle y este mismo verano, embarazada de cinco meses, tenía un tipazo espectacular en bikini. Sin embargo, y como se dice coloquialmente, «cuando hace pop ya no hay stop» y la modelo ya luce una más que abultada barriguita que evidencia que, en poco más de dos meses, dará la bienvenida a su primer hijo.
Mientras espera la llegada de Martín, María – a la que hace unos meses diagnosticaron esclerosis múltiple – está aprovechando para cuidarse al máximo, y entrena a diario para mantenerse en forma. Así, y durante una intensa jornada de deporte, ha presumido con unos leggins negros y un top del mismo color, de su abultada tripita de embarazada, que, no se puede negar, le queda fenomenal. Y es que la influencer está más radiante que nunca y desprende felicidad e ilusión por los cuatro costados.