La vida está llena de historias y biografías curiosas e impactantes. Y hay muchas celebridades y personajes reconocidos como Jordi Cruz que nadie podría imaginar determinados pasados. El caso del cocinero catalán merece espacio aparte porque, resumiendo, hablamos de una persona que posee cinco estrellas Michelín pero que comenzó siendo delincuente. Ahora profundizamos en la historia.
Quién diría que una persona tan seria y estricta, como podemos ver cada semana en Masterchef, no sólo en las valoraciones sino en cómo se dirige a los concursantes, tuvo un perfil tan alejado de lo que es actualmente. Pepe Rodríguez, Samantha Vallejo-Nájera y Jordi Cruz, han pasado del reconocimiento en el mundo laboral gastronómico a ser unos de los rostros más visibles de la televisión, pero el caso de Jordi se lleva la palma y ha sido portada de numerosas revistas.
3Los comienzos en la cocina de Jordi Cruz
Como ha pasado con otros cocineros, sus inicios en la cocina fueron sustituyendo a alguien, en este caso a su madre. Se encontró indispuesta y se puso manos a la obra. Tenía 7 años y es cuando elaboró su primer plato: unas judías con patatas. «Cuando era pequeño era malo en casi todo. Se me daba muy mal estudiar pero vi una ventanita. Me di cuenta que para la cocina sí que tenía talento y decidí focalizar todo lo que tenía en esa disciplina», reconocía.