En medio de esta ‘nueva normalidad’, derivada de la pandemia por el COVID-19, las mascarillas forman parte de nuestra vida diaria. Y si bien las mascarillas faciales ayudan a prevenir la propagación de enfermedades, también causan estragos en nuestra piel. Poros obstruidos, imperfecciones, inflamación e irritación, son algunas de las afecciones derivadas del uso prolongado de la mascarilla; y es por ello que Mercadona y Lidl ofrecen a sus clientes una serie de cremas que se convertirán en imprescindibles para el tratamiento del ‘maskne’.
‘Maskne’, es el término empleado para definir estas afecciones – derivado una inteligente combinación de las palabras ‘máscara’ y ‘acné’ – que, aunque no lo creas, son más comunes de lo que imaginas. Entonces, ¿cómo prevenimos los brotes de la mascarilla facial?
1Skin Foodies, lo nuevo de Lidl
La compañía de origen alemán Lidl está dando de qué hablar con un lanzamiento inusual en cosmética, tratándose de una cadena de supermercados.
Con precios muy low cost, que oscilan entre los 0,99 euros de su mascarilla facial exfoliante y los 2,99 euros de las cremas faciales antiarrugas, Skin Foodies promete ser un bestseller en los estantes del súper, sobre todo ahora que muchas clientas pasan dificultades económicas debido a la pandemia del coronavirus y tienen otras prioridades en el gasto.
Lidl les pone en bandeja eso de cuidarse al tiempo que compran productos de primera necesidad, como los huevos, la leche y el pan.
La línea Skin Foodies podría ser su próximo hit, dadas las nuevas tendencias de mercado, que abogan por productos más naturales. La compañía asevera que “su origen es natural hasta en un 95% y son aptos para veganos”. Eso sí, no excluye algunos parabenos que tilda de necesarios “para la conservación óptima”.