No tiene pelos en la lengua, y esa es una de las características por las que siempre le recordaremos en televisión. Con mucho peloteo de por medio y cogiendo todo con pinzas, Coto Matamoros siempre ha dicho lo que pensaba, le pesara al que le pesase. Es por eso que hoy os queremos dar algunos motivos por los que el hermano de Kiko Matamoros debería de plantearse volver a la pequeña pantalla.
3«Mi hermano tiene dismorfofobia»
> Esta enfermedad consiste en un trastorno que lleva al paciente a obsesionarse con un complejo, ya sea real o no, respecto a su apariencia física. Quien la sufre puede llegar a padecer depresión, ansiedad, agorafobia o perjudicar gravemente en el normal ejercicio de sus actividades sociales y profesionales. Si bien Kiko Matamoros no ha sido diagnosticado por un profesional, su hermano Coto encuentra en sus frecuentes operaciones y tratamientos estéticos un pretexto para creer que el colaborador de Sálvame sufre dismorfofobia.
Lo cierto es que los últimos retoques estéticos de Kiko Matamoros han sido motivo de controversia en las redes sociales. El colaborador se presentó en Sábado Deluxe tras inyectarse cerca de 25 diales de ácido hialurónico. Toda España se percató de que su cara estaba más hinchada de lo normal y su nuera, Carla Barber, artífice de la intervención, pagó los platos rotos, pues se llegó a cuestionar su valía profesional.
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