Aitana y Cepeda, concursantes del OT 2017, protagonizaron sin duda una de las historias de amor más intensas y recordadas del concurso, al nivel casi de Chenoa y Bisbal. Pero la cosa no sólo duró poco sino que acabó mal. Por eso es momento de repasar todos esos problemas y ‘desplantes’ y porqué pasaron del amor al odio.
Parece tan lejano esa edición donde pudimos ver cómo se miraban, cómo se cantaban, y los gestos que se dedicaban el uno al otro. Parecía un amor para toda la vida pero fue todo lo contrario.
1El ‘flechazo’ en la academia
Su bonita relación llegó a calar en los espectadores hasta el punto de que se creó el fandom ‘Aiteda’ como apoyo a la pareja, tanto por su valía como artistas como por su vínculo personal.
Su conexión durante el concurso fue más que evidente desde la primera gala, en la que el ‘No puedo vivir sin ti’, se convertiría en su himno personal. En aquella gala actuaron, pero tres meses después cuando la volvieron a cantar, se apreció la diferencia. Ya no cantaban, sino que contaban su historia.