La decisión tomada por el príncipe Harry y su esposa Meghan Markle de renunciar a la familia real británica, tomó a muchos por sorpresa y al mismo tiempo, han surgido una serie de dudas e incertidumbres acerca de cómo darán inicio a su vida profesional y familiar alejados de la realeza.
A inicios del 2020, la pareja realizó una declaración publicada en su sitio web oficial, donde aseguran que se enorgullecen de su trabajo, pero que también valoran la «capacidad de obtener un ingreso profesional» y eso, según las normas de la monarquía, no se les permite. Estas eran parte de las razones que los llevaron a tomar tal decisión.
Este nuevo comienzo en la vida del príncipe Harry y Meghan Markle trae consigo una serie de cambios, la renuncia de muchos privilegios de los que goza la monarquía británica, así como de todos los lujos que la pareja ha tenido que dejar atrás.
3Harry y Meghan tendrían que reducir sus gastos habituales de manera considerable
Los duques de Sussex al querer emprender una nueva vida en donde puedan ser “económicamente independientes”, deben reducir sus gastos habituales a los que estaban acostumbrados al formar parte de la familia real británica.
Según el diario británico “The Daily Mail “, Harry y Meghan tienen una secretaria privada a la que se le paga 190 mil dólares, una niñera para Archie que tendría un sueldo similar, además tienen un ama de llaves en Frogmore Cottage, dos asistentes personales y dos ayudantes de palacio, que probablemente ganan 30 mil y 40 mil dólares cada uno.
Además, durante la estancia que tuvo la pareja con su hijo en Canadá, gastaron 14 millones de dólares solo pagando una paradisíaca casa en la isla de Vancouver, y además gastaron 3,14 millones de dólares en remodelar la cabaña Frogmore y en comprar una propiedad en una ciudad canadiense.
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