El corte long bob nos acompaña cada temporada en las tendencias de moda, no solo resulta un estilo que perfectamente evoluciona y se adapta fácilmente, sino que utilizando diferentes variantes en el método de corte, podemos crear desde estilos románticos y comerciales hasta looks rompedores y vanguardistas.
Sabemos que desde que inició la cuarentena, han sido muchas las que han decidido dar un cambio a su look y pasar por la peluquería, desde el gesto más radical con el ‘pixie’ de moda este verano. Pero si un corte sigue manteniendo el primer puesto en cuanto a deseados es, sin lugar a dudas el corte bob.
Este tipo de corte, que está cerca de convertirse en clásico atemporal, especialmente gracias a su versión lob, es decir el long bob, que es un bob algo más largo por delante que por la parte de la nuca y que es ideal para cambiar de look, sanear las puntas y dar otro aire a tu melena.
La última en apuntarse a la tendencia ha sido Chrissy Teigen que ha decidido cambiar de look y apostar por el corte más favorecedor en 2020.
El corte long bob es un corte muy versátil que, manteniendo el largo de la melena, dará una luz completamente distinta a tu rostro; pues la clave del corte reside en hacer un degradado casi imperceptible en las puntas, de este modo tendrás más volumen en la parte baja de la melena.
3Diferentes tipos del «bob»
Los cortes bob son realmente versátiles y prácticos por eso cualquier variante en su ejecución será el resultado de un estilo adaptado y favorecedor a cada cliente. A continuación te contamos las diferentes opciones que puedes desarrollar y las técnicas de corte más sencillas para conseguirlo.
El corte Bob Clásico debe ser simétrico, equilibrado y estrictamente pesado, la longitud se sitúa a la altura de la mandíbula. Admite coloraciones globales y homogéneas para potenciar visualmente la geometría y requiere una técnica de corte muy precisa, basada en líneas horizontales cortadas por norma general en su caída natural.
En el Long Bob, el largo del cabello está comprendido entre la clavícula y la línea inferior de los hombros, y se caracteriza por ser más corto en la zona posterior respecto a la longitud frontal; por lo que una de las técnicas de corte más utilizadas en este estilo es la línea diagonal descendente. Esta variante admite una ligera degradación en las puntas para favorecer un delicado movimiento en el cabello, lo que permite técnicas de coloración irregulares y parciales.
Mientras que la reducida longitud del Short Bob permite degradar adecuando los volúmenes a diferentes formas del rostro. Básicamente, permite generar volumen y resulta muy apropiado en cabellos finos y con escasa densidad. En la técnica del corte, se utilizan particiones para combinar contornos definidos con zonas medias y altas degradadas, por lo que diferentes tonos en la coloración funcionan perfectamente.
En el Bob Asimétrico, se adapta a cualquier longitud de cabello ya que la asimetría se define – por lo general – en las zonas laterales. En este caso, la técnica de trabajo más recomendable es con particiones en asimetría y diferentes largos con desplazamientos entre una mitad del cráneo y el lado opuesto; por lo que la técnica de color debe ser asimétrica en cuanto a colores y formas de aplicación.
Por su parte, el Wave Bob es un corte perfectamente diseñado para adaptarse a los cabellos con textura y ondulaciones suaves. Fácilmente admite un peinado poco estructurado y elaborado a base de productos acondicionadores y con las manos. En este estilo, la combinación de diferentes colores permite resaltar las ondas y la técnica de corte debe controlar los volúmenes en la parte alta del cráneo para crear una sensación de pirámide.