La reconocida presentadora de televisión Ellen DeGeneres está en el ojo del huracán después de que varios empleados – anteriores y actuales – de su popular show, hablaran sobre el entorno laboral “tóxico”, favoritismo por parte de los productores ejecutivos y racismo.
En un artículo basado en entrevistas de un empleado actual y 10 ex empleados del programa, que solicitaron el anonimato por temor a ser incluidos en la lista negra de la industria del entretenimiento, BuzzFeed News describió un entorno en el que los empleados desfavorecidos fueron despedidos después de tomarse un tiempo libre por razones médicas o de duelo, donde los problemas no podían plantearse a gerentes hostiles y caprichosos, y los empleados de menor rango tenían prohibido hablar con DeGeneres cuando la veían por las oficinas.
2Los ex empleados hablan de un ambiente de trabajo tóxico
Los ex empleados aseguraron que el problema principal no es la actitud que pueda tener Ellen en el trabajo, sino el poder que ejercen los productores a cargo de uno de los shows más vistos en la televisión estadounidense.
“La gente se enfoca en los rumores sobre cómo Ellen es mala y todo eso, pero ese no es el problema”, dijo uno de los entrevistados. “El problema es que estos tres productores ejecutivos que dirigen el programa están a cargo de muchas personas y son quienes hacen la cultura y están exponiendo esta sensación de acoso y maldad. Sienten que todos los que trabajan en The Ellen Show tienen suerte para trabajar ahí: ‘Entonces, si tienes un problema, debes irte porque contrataremos a alguien más porque todos quieren trabajar aquí’”, agregó.
Otro ex empleado fue despedido después de un año en que requirió un permiso médico de tres semanas después de un accidente automovilístico, tres días libres para viajar al funeral de un miembro de la familia y trabajar de forma remota durante dos días para asistir a otro funeral familiar. Otro, que había pasado un mes en un centro de salud mental después de un intento de suicidio, fue despedido después de regresar al trabajo. “Algunos de los productores hablan abiertamente en público sobre la adicción y la conciencia de la salud mental, pero son la razón por la que hay un estigma”, señaló.