Kanye West está dando mucho que hablar en las últimas semanas tras el anuncio de su candidatura a las presidenciales de Estados Unidos, pero el anuncio que resultó toda una sorpresa fue el relacionado con su esposa Kim Kardashian, pues el rapero aseguró que lleva dos años intentando divorciarse de ella sin éxito, además de afirmar otros asuntos privados.
Una de las afirmaciones del rapero fue que su esposa intenta encerrarle en un psiquiátrico: “Kim ha intentado volar a Wyoming para ver a un doctor y encerrarme como en la película ‘Get Out’, porque lloré acerca de salvar la vida de mi hija”. Haciendo referencia al episodio en que la pareja estuvo a punto de abortar a su primogénita.
6La convivencia de la pareja durante el confinamiento no ha sido fácil
Kim Kardashian y Kanye West son una de las parejas de más alto perfil en la cultura pop, por lo que muchos de los detalles de su relación regularmente aparecen en los titulares, desde la expansión de su familia hasta los cambios de carrera de West.
Sin embargo – en los últimos días – han surgido noticias no tan buenas, que efectivamente revelan que su matrimonio está sufriendo.
Con la mayor parte de California aún encerrada en sus hogares, Kardashian y West todavía pasan la mayor parte de su tiempo en casa, rodeados de sus cuatro hijos. Un reporte reciente de PageSix afirma que los dos no están prosperando en esta situación; señalando que Kanye es “supercontrolador” y está afectando a Kardashian, quien “siente que su marido está tratando de imponer sus puntos de vista sobre su vida”.
Y es que, al igual que muchas otras parejas, el confinamiento ha sido una prueba de fuego para Kim Kardashian y Kanye West que – evidentemente – no están pasando por su mejor momento.
El pasado mes de junio, según The Sun, varias fuentes han asegurado que la pareja ha tenido roces durante el confinamiento. Tanto es así que, según adelantó el Daily Mail, Kim Kardashian se está planteando irse a vivir a otra casa por el momento para pasar tiempo lejos de su marido.
Asimismo, aseguran que Kim Kardashian no quiere separarse. “Las cosas son difíciles entre Kim y Kanye porque normalmente nunca pasan tanto tiempo juntos, pero ella no quiere el divorcio”, ha afirmado la citada fuente. “Lo último que quiere es separarse, especialmente porque la reacción pública después de su segundo divorcio con Kris Humphries fue insoportable”, agregó.
Las mismas fuentes aseguran que ambos tienen caracteres muy distintos y llevan vidas muy diferentes: “Ella se levanta temprano y hace ejercicio y él se levanta tarde. Kim está trabajando sin parar y haciendo lo suyo; Kanye está teniendo dificultades porque no tiene una rutina como Kim”.