Muchas fueron las niñas de Disney que cautivaron los corazones de los adolescentes durante la década de los 2000s e incluso, durante la década de los 2010s. Diez y hasta 20 años después, varias de estas “niñas buenas de Disney” crecieron y hoy en día… bueno, ya no son tan buenas.
Sin duda alguna, Miley Cyrus y Lindsay Lohan encabezan la lista de las chicas que, al abandonar los estudios de televisión de Disney, decidieron abrirse paso en el mundo del entretenimiento con una actitud… bueno, un tanto atrevida. Otras de las “chicas malas de Disney”, que si bien no han acumulado una fama tan negativa pero también han dejado mucho de qué hablar en los últimos años son Ariana Grande, Debby Ryan, Selena Gómez, y otras.
4Lindsay Lohan experimentó una épica caída del estrellato
Otra de las chicas malas de Disney es, sin duda alguna, Lindsay Lohan. La actriz estadounidense de 34 años de edad que cautivó a una generación entera por sus inocentes looks, su cabello rojizo, y sus pecas infantiles, y también acaparó la pantalla grande con películas como The Parent Trap (1998), Freaky Friday (2003), Confessions of a Teenage Drama Queen (2004), Herbie: Fully Loaded (2005), y sin duda alguna, el clásico adolescente, Mean Girls (2004).
Lohan también consiguió éxito en la pantalla chica, tras presentarse en la novela estadounidense Another World a los 10 años de edad y posteriormente participó en proyectos tales como Life-Size (2000) y otros. Y es que el talento de la famosa actriz no solamente se limitó a la pantalla grande y a la chica, sino que también destacó en los estudios musicales con dos discos originales: Speak (2004) y A Little More Personal (Raw) (2005).
Sin embargo, pese a su éxito, y a pesar de haber amasado una fortuna de millones de dólares estadounidenses, la famosa Lohan le dio cabida a sus deseos carnales y una supuesta adicción a las drogas, además de varias malas decisiones en cuanto a sus inversiones financieras, que la dejaron con un Net Worth de menos de USD $300 mil. Sin hablar de sus múltiples arrestos y de sus problemas con la ley, su vida personal acaparó la prensa amarilla en los Estados Unidos, y sus extravagancias fiestas y su vida nocturna se hicieron famosas en la escena Hollywoodense, lo que la llevó a una famosa entrevista en el programa de televisión de Oprah Winfrey, en donde lloró y se arrepintió por la vida salvaje que llevó por todos esos años. Sin embargo, la entrevista le sirvió solamente como propaganda publicitaria, pues, de acuerdo con la prensa, Lohan siguió con sus andanzas.