Rocío Flores se ha convertido en el fichaje estrella de la nueva edición de Supervivientes. A pesar de que durante sus intervenciones puntuales en Gran Hermano VIP aseguró que no quería convertirse en personaje del corazón, el caché de 30.000 euros semanales ha hecho que olvide sus propios principios y se haya enrolado en una aventura que ha destapado uno de sus mayores escándalos.
Coincidiendo con el estreno del reality, Vanitatis hizo pública la sentencia que la condenaba a un delito de malos tratos habituales, una falta de amenazas, un delito de malos tratos y una falta de injurias perpetrados contra su madre y que fueron juzgados tras una denuncia interpuesta por la menor de la que la madre fue absuelta. Una situación que ninguna de las partes ha querido que viera la luz pero que, sin duda alguna, responde a las preguntas que hasta la fecha no tenían respuesta. Son muchos los que, en cambio, siguen pensando que los episodios por los que Flores fue condenada únicamente tendrían que haber servido para unirlas más.
El documento definitivo
Pero, ¿qué ocurrió durante el conflicto judicial? A pesar de que son muchos los periodistas que han asegurado que la madre no quiso volver a tener relación con la hija, Cotilleo.es publica, en exclusiva, el documento mediante el que se demuestra que no sólo Carrasco intentó reconducir la situación, sino que fue la joven y su padre los que impidieron un final diferente. Tal y como se puede observar en el citado documento, Rocío Flores no quiso un acercamiento con su madre: «Se habló con Rocío Flores de la posibilidad de trabajar con ella y su madre en un programa de mediación pero a la menor y a su padre les parecía una aberración tal posibilidad ya que sería asumir cualquier tipo de responsabilidad respecto del hecho denunciado».
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