La ganadora de la séptima edición de Gran Hermano VIP, Adara Molinero, ya no es tan popular como cuando lo fue al salir de la casa. El apoyo que recibió se está desmoronando y todo por culpa de sus arrebatos. En Guadalix de la Sierra, esta fue su mayor virtud, pero en las redes sociales parece no resultarle. Su última salida de tono le ha jugado una muy mala pasada. Sigue leyendo.
3Las redes sociales, su peor estrategia para seguir en el foco mediático
> Adara Molinero se ha convertido en una espectadora más tras salir de El tiempo del descuento a las dos semanas de comenzar el concurso. Suficientes, según ella, para enamorarse de nuevo locamente de Gianmarco. Pero las últimas escenas que el italiano ha protagonizado con el Maestro Joao, el que se hacía pasar por el mejor amigo de la ex azafata de vuelos, no le está gustando un pelo. Ella avisaba: “esto puede quebrar mi relación con Joao. No me gusta un pelo”.
Pues bien, parece que Adara Molinero ya ha tomado una drástica decisión y lo ha hecho saber a través de las redes sociales. “Muy decepcionada con Joao, un traicionero disfrazado de amigo”, escribía hace tan solo unas horas en su perfil de Twitter y es que parece que la ex azafata de vuelos no levanta cabeza. Participar en la séptima edición de Gran Hermano le ha supuesto cambiar radicalmente su vida, dejando atrás al padre de su primer hijo, Hugo Sierra. Aun así, son muchos los que piensan que Adara tan solo está jugando.
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