La sombra del Caso Nóos es alargada. Ya ha pasado una década desde que se destaparon los trapos sucios de Iñaki Urdangarín, pero las consecuencias de aquella tremenda polémica siguen trayendo de cabeza a toda su familia. La infanta Cristina todavía se siente en el punto de mira, y la situación se ha tornado tan desagradable para ella que se ha visto obligada a poner tierra de por medio. La hija de don Juan Carlos I pretende huir de nuestro país, aunque le cueste su puesto de trabajo… ¿Quieres conocer más detalles? Sigue leyendo, te lo contamos todo a continuación.
4La infanta se aleja de su familia
> Por todos es sabido que las relaciones de doña Cristina con su familia se han complicado bastante en los últimos años. Los vínculos con su hermano, el rey Felipe, y doña Letizia se rompieron en cuanto la condenaron al ostracismo por la implicación de su marido en el Caso Nóos. Tampoco van bien las cosas con su padre, don Juan Carlos, que evita conversar con ella porque “se interponen siempre las reclamaciones y súplicas acerca de Urdangarín”, recoge Pilar Eyre en su columna de Lecturas. Fue su madre, la reina Sofía, quien más la ayudó en este sentido, pero la voluntad de la griega ya carece de relevancia en Zarzuela. Dentro del núcleo borbónico, la exduquesa de Palma solo puede contar con el apoyo de su hermana mayor, la infanta Elena, pero incluso ella intenta mantenerse al margen para no sufrir los daños colaterales del exilio de Cristina.
Así, no parece extraño que la infanta no guarde mucha ilusión a la hora de volver a dejarse caer por España. De vez en cuando se despertará en ella un poco de morriña y volverá unos días para reunirse con los que aquí todavía la aprecian, pero ahora que no trabaja para la Caixa, espera que los viajes a nuestro país se produzcan solo cuando así lo desee, no cuando su empleo se lo imponga.
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