Todos los ojos estaban pendientes de Leonor en la que ha sido su primera prueba de fuego como heredera, los Premios Princesa de Asturias. Había gran expectación por saber si la princesa superaría con nota uno de los encuentros más importantes para la Corona. Pues bien, cuando todo ha pasado, llega el momento de hacer balance. Doña Letizia no está contenta por cómo han ido las cosas. Otra vez aparecen las críticas a las diferencias que los reyes hacen entre sus hijas. Para colmo de males sucedió un hecho que provocó un nuevo rifirrafe entre reinas. ¿Quién da más? Te lo contamos todo a continuación.
Leonor, nerviosa y temblorosa
> Doña Letizia se implicó personalmente en la preparación de Leonor en su primera prueba de fuego como heredera, los Premios Princesa de Asturias. Aunque la prensa cortesana, parafraseando a Jaime Peñafiel, se ha deshecho en elogios hacia la princesa, el testimonio de uno de los asistentes les contradice. Lo cierto es Leonor ya manifestó su intranquilidad el pasado viernes al confesar que estaba “menos nerviosa de lo que esperaba”. Fue la primera alerta de que algo no iba bien.
El viernes, en un encuentro que los reyes y sus hijas mantuvieron con los mejores estudiantes de fin de grado de la Universidad de Oviedo, una de las graduadas, Cristina Menéndez, explicó cómo había encontrado a Leonor: “Estaba temblando y la voz le salía muy floja”. Cristina añadió: “A la pobre no se le escuchaba apenas. Le deseamos mucha suerte y que lo iba a hacer bien. Es una niña, va a estar nerviosa, pero su padre lo hizo bien en su momento”.
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Estrepitoso fracaso de Letizia
> Es de sobra conocido el perfeccionismo de doña Letizia. Una cuestión que no pasa desapercibida y que causa problemas a quienes están a su alrededor. La reina, tal y como han revelado quienes bien conocen el paño, suele meter cucharada en los discursos de don Felipe. También modifica los suyos. Trascendió que fue ella quien preparó a Leonor cuando leyó en público por primera vez un párrafo de la Constitución. La reina se mostró emocionada ante el desparpajo de su hija.
Lo sucedido en Asturias ha sido un duro batacazo para Letizia. Parecía que la princesa estaba sobradamente preparada pero se ha puesto de manifiesto su inseguridad. Algo de lo que mucho se habló durante el verano pasado. En el posado familiar, la prensa resaltó el nerviosismo de Leonor. Buscaba la protección de sus padres y pidió a don Felipe que no la dejara sola. El asunto fue ampliamente resaltado por medios internacionales. Compararon a la princesa con otras herederas y salió perdiendo. Una realidad que no gustó a su madre. Otra vez el peor fantasma de doña Letizia ha vuelto a aparecer.
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Nuevo rifirrafe entre Reinas
> Otra vez se ha vuelto a repetir lo sucedido en Palma, cuando Letizia evitó que doña Sofía se fotografiara con sus nietas. Aquello levantó una polvareda importante dentro y fuera de nuestras fronteras. Pues bien, la reina tiene claro que es ella quien marca los tiempos y la ha vuelto a liar en Asturias. Según explican El Nacional, las cosas sucedieron a la entrada del Teatro Campoamor:
“Doña Sofía no sabe dónde ponerse y Letizia le dice que se aparte, el rey Felipe intuye nuevo escándalo y se gira como diciendo ‘¿Otra vez un numerito en público?’ y la reina Sofía le dice claramente a su hijo ‘No, no’. Letizia vuelve a recriminarle alguna cosa a su suegra y Felipe vuelve a girarse como diciendo ‘¡Basta!’. La que está mejor es Leonor que ha aprendido la lección y en lugar del manotazo a la abuela pone paz. La infanta Sofía en el otro extremo hace que no se entera”. El vídeo se convirtió en viral a las pocas horas de subirlo a la red. A la salida del acto, doña Letizia y doña Sofía se dejaron ver abrazadas por la cintura. Sin duda, alguien de Casa Real advirtió de la que se estaba liando y se impuso el paripé.
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Sofía, la infanta desplazada
> Es deseo de los reyes, especialmente de doña Letizia, que la infanta Sofía acuda a todos los actos donde Leonor tenga protagonismo. Sin embargo, algunos expertos señalan que esto podría volverse en su contra. Sofía no tiene papel a desempeñar, más que el de simple espectadora. Suele ocurrir en los actos a los que acude la familia real que don Felipe solo tiene ojos para la heredera.
Aunque se ha explicado que los reyes han decidido que en los actos institucionales don Felipe estará pendiente de Leonor y Letizia de Sofía, lo cierto es que la infanta queda desamparada en muchas ocasiones. No se comprende que el rey no tenga ni un gesto para su hija menor. Cuando Leonor leyó la Constitución, los ojos de Letizia solo estaban pendientes de ella. En esa ocasión se vio a una Sofía perdida y descolocada.
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