La operación de rey Juan Carlos ha dado mucho de qué hablar. Las visitas al hospital de la familia real no se han hecho esperar y se han vivido algunos momentos que han marcado un antes y un después entre los miembros de nuestra monarquía. La infanta Cristina ha salido de su escondite y ha aprovechado su regreso a España para asestar un guantazo sin mano a su enemiga número uno, la reina Letizia. ¿Quieres saber qué ha pasado? Sigue leyendo para descubrirlo.
Un operación polémica
> Hace una semana que Casa Real anunció que el rey Juan Carlos I tendría que someterse a una operación cardíaca. Aunque al principio no trascendió el motivo de la intervención, hoy se sabe que a su majestad se le han realizado tres by-pases aorto-coronarios para solucionar unos problemas de salud derivados del exceso de grasa en las arterias del emérito. La cirugía salió como estaba previsto y el Borbón se recupera ahora en la Unidad de Cuidados Intensivos, recibiendo las visitas de varios miembros de su familia.
La primera en acudir al hospital fue su mujer, la reina Sofía, que aunque no pasó la noche con él, se presentó a primera hora de la mañana en la clínica Quirón de Madrid. Quien también se ha querido acercar a ver a su padre ha sido doña Cristina, que ha salido de su escondite para comprobar de primera mano cómo se encuentra el emérito después de la delicada intervención a la que se ha sometido. La infanta ha aprovechado su regreso a España para asestar un guantazo sin mano a su mayor enemiga, doña Letizia, que aún está temblando después del dardo envenenado que ha recibido.
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El guantazo sin mano de Cristina a Letizia
> No pueden ni verse y no se esfuerzan en disimularlo. Letizia y Cristina nunca se llevaron bien y la reina aprovechó todo el escándalo que se formó con el Caso Nóos para alejar a su cuñada de Casa Real. Una institución así no podía permitir que su imagen se viera diezmada tras el ingreso en prisión del marido de la infanta, Iñaki Urdangarín. A Ortiz le vino esta situación como anillo al dedo para marcar unos límites con la hermana de su marido, que terminó abandonando nuestro país. De hecho, ni siquiera se dejó ver por Marivent durante las vacaciones oficiales de la monarquía.
Ahora, Cristina ha propinado un guantazo sin mano a doña Letizia al regresar a España para ver a su padre. A Ortiz no le ha gustado nada este nuevo acercamiento a Casa Real y no lo disimuló ante la prensa. Cuando los reporteros preguntaron si las infantas acudirían al hospital para visitar a Juan Carlos, nuestra soberana guardó silencio y miró a Felipe VI para que él respondiera por ella. Se llevan tan mal que no quiere ni mencionarlas. De hecho, se han organizado de maravilla para no coincidir en la clínica y las visitas al emérito se están sucediendo a cuentagotas.
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Juan Carlos, solo en su peor momento
> Operan a tu marido, a tu padre o a tu hermano. Tú tienes los nervios a flor de piel y te es imposible seguir con tu vida normal en casa, como si nada. El día de la intervención te plantas en el hospital y no sales por la puerta hasta que la situación mejora. Es lo normal en una familia unida, pero no ha sido el caso de nuestra monarquía. El rey Juan Carlos pasó solo la noche que lo operaron y se intuye que las visitas que recibe se deben únicamente al deseo de mantener las apariencias. Así lo aseguraba Pilar Eyre en su cuenta de Twitter.
«Intervención importante. Está solo. Nadie le coge la mano cuando va al quirófano, ni deposita un beso en su frente. La madre y el hijo pasan un par de horitas cuando les va bien por el hospital y hala, para casa, «cuando pueda recibir visitas, ya volveremos». La soledad del rey», sentenciaba la periodista experta en realeza. De hecho, resalta mucho que las infantas Leonor y Sofía no se hayan acercado a ver a su abuelo. También fue chocante que doña Cristina pasara menos de media hora con su padre. No cabe duda: tienen otras prioridades, pero el paripé de familia unida no puede faltar en estos momentos.
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Los planes de doña Cristina con Iñaki
> Letiza tiene que estar tirándose de los pelos tras los últimos acontecimientos. Ya no solo porque doña Cristina haya regresado a España para volver a codearse con la familia real, sino por sus planes a medio plazo. Iñaki Urdangarín podrá solicitar dentro de muy poco un permiso de salidas para disfrutar de un segundo grado, por lo que solo tendría que regresar a prisión para dormir. En este sentido, se puede intuir que la infanta volverá a nuestro país para pasar el día junto a su marido, aunque todavía no hay ninguna confirmación al respecto.
Mientras, doña Cristina ha de conformarse con las visitas a la cárcel. Lo más probable es que la infanta aproveche su regreso a España para ver a su marido en prisión, pero nunca ha trascendido ninguno de sus encuentros, aunque se sabe que se han producido unos cuantos. Es lo que le faltaba a Letizia, tener a su cuñada rondando de nuevo por Zarzuela.