Todos los ojos están puestos en la reina Letizia. Se cuentan ya las horas para ver cómo es su comportamiento en Mallorca durante la próxima Misa de Pascua. La opinión pública está más pendiente de la consorte que nunca. Es por eso que sorprende enormemente que haya sido justo ahora cuando haya decidido sobrepasar todos los límites. La asturiana ha vuelto a poner en jaque la estabilidad y la continuidad de la monarquía con una inesperada salida de tono.
El primer aviso de su fuerte carácter
> Desde que la vimos por primera vez del brazo del entonces príncipe Felipe supimos que Letizia daría mucho que hablar. Es una mujer de armas tomar. Algo que quedó muy claro en los jardines del palacio de El Pardo. En este escenario, que escogió el heredero para presentar a su prometida en público, fuimos testigos de un acto sin precedentes que hoy sigue generando un sinfín de comentarios negativos. Cuando el heredero y la periodista estaban hablando con los medios de comunicación acerca de los regalos que se habían hecho con motivo de su compromiso, se producía un momento histórico.
La que hasta entonces había sido presentadora de los Informativos de TVE mandó callar a Felipe. No tuvo ningún reparo en decir delante de las cámaras que la dejara terminar de hablar. No hay duda: Letizia aterrizó con muy mal pie en la tradicional monarquía. Y es que aquella soberbia espantó a toda la familia. Especialmente a don Juan Carlos y doña Sofía, que siempre han cuidado los modales hasta el extremo. Lo que no imaginaban los monarcas es que el paso del tiempo no refinaría a su nuera sino todo lo contrario. Descubre su última salida de tono.
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El terrible desaire de doña Letizia
> Letizia tiene mucho carácter y no se esfuerza por demostrar lo contrario. A pesar de que ha recibido clases de Protocolo, no han sido pocas las ocasiones en las que se lo ha saltado. En la memoria de todos está la anécdota a la que hace escasas semanas hacía referencia la web www.merca2.es. Según relata el citado medio, la monarca tuvo un carácter soberbio y desagradable en una de las visitas que hizo en El Corte Inglés. Doña Letizia se habría dirigido hasta la sección de belleza de esta gran superficie para buscar un producto concreto (posiblemente su champú orgánico de cabecera, Go Organic).
Sin embargo, no lo encontró. Así, la dependiente le ofreció otros productos similares. Algo que no le debió sentar nada bien a la esposa del jefe de Estado, quien hizo saber su desaprobación. «Sí, claro, para que me manchéis el pelo de grasa», habría asegurado Letizia. Además, consciente de que todo el mundo estaba atento a la escena, lo remató con un: «Vaya, ya está todo el mundo mirando en lugar de trabajar». A pesar de que aquello generó un enorme revuelo, ahora ha ido mucho más lejos. Lee lo siguiente y entérate.
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La frase que coloca a la Reina en el punto de mira
> Tal y como contamos en exclusiva en Cotilleo.es el pasado fin de semana, Letizia ha decidido pasar la Semana Santa en Roma junto a sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía. Una escapada con la que, además, intenta correr un tupido velo tras el desafortunado comportamiento que tuvo pocos días antes. En la Real Casa de la Moneda hizo entrega de los Diplomas de Graduación a la VII promoción del “Martes en Grabado y Diseño Gráfico” y del “Premio Tomás Francisco Prieto.
Aunque todo parecía ir sobre ruedas y el acto se desarrolló de manera distendida, la Reina dejó boquiabiertos a todos con un comentario completamente inapropiado para alguien de su estatus. Cuando entró a las aulas en las que se llevan a cabo lo diseños, una aprendiz quiso ejercer de anfitriona con Letizia. Así, le explicó el proceso que siguen. «No me cuentes esto otra vez, que ya me lo han contado al entrar», dijo según recoge El Español. Una contestación que dejó completamente fuera de lugar a la joven. También al resto de asistentes. Nadie daba crédito a lo sucedido ni sabían cómo reaccionar. A continuación, entérate del sorprendente motivo que la llevó a hablar así.
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Un rifirrafe que aún sigue levantando ampollas
> Este zasca parece tener su origen en una discusión previa. Un momento de tensión que protagonizaron de manera íntima don Felipe y doña Letizia. «El día antes los Reyes tuvieron una discusión, como la de muchos matrimonios. Y parece que Letizia decidió vestirse así para fastidiar a su marido», aseguran desde el medio anteriormente citado. Y es que, el origen de todo no es otro que el desaire de la Reina con su suegra a las puertas de la catedral de Palma. El tema más polémico de los últimos tiempos.
El motivo sería el malestar del jefe de Estado con la decisión de su esposa de volver a vestirse igual que el día de la misa de Pascua. Además, no eligió ese mismo look un día cualquiera. Lo hizo cuando se cumplía un año de aquel rifirrafe con doña Sofía. Algo considerado como una auténtica provocación. Especialmente ahora que se ha iniciado la cuenta atrás para que la Misa de Pascua vuelva a celebrarse por primera vez tras aquel escándalo. Sigue leyendo y entérate de lo que sabemos hasta ahora de ese reencuentro.
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La clara postura del don Juan Carlos
> Queda muy poco para que la catedral de Palma vuelva a recibir la visita de la familia real. El domingo 21, si nada cambia, volveremos a ver a los Borbones allí juntos. Todo hace presagiar que tendremos ante nosotros una orquestada escena de paz y armonía en la que a . Un momento en el que a Letizia y Sofía no les quedará otro remedio que dedicarse gestos cómplices y sonrisas por doquier. Pero la opinión pública sabe que este buen rollo con el que nos querrán convencer se aleja bastante de la realidad.
De hecho, el artículo al que hacíamos referencia más arriba relata también la postura que el emérito tiene respecto a ese marcado día. «Don Juan Carlos no quiere ir. Otra cosa es que le obliguen, pero su idea es no pasar por Mallorca. Lo del año pasado le sentó a cuerno quemado. No quiere aparecer en la foto con la reina Letizia. No quiere ni oír hablar del tema. Ahora sólo quiere descansar y que le dejen tranquilo», cuentan.
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