Paz Padilla y Terelu Campos tienen un problema que les quita el sueño. Estas dos mujeres comparten plató en Sálvame y preocupaciones. Tanto Anna Ferrer como Alejandra Rubio no se lo están poniendo nada fácil a sus madres. Las niñas van a su aire y no escuchan consejos. ¿Qué ha pasado? Te lo contamos todo a continuación.
Paz Padilla enchufa a su hija
> Paz Padilla está orgullosísima de su hija. Anna Ferrer estuvo visitando a su madre en Sálvame con motivo del millón de followers que ha alcanzado en Instagram. Recientemente, pasó por Got Talent. A la vez, Anna está realizando prácticas en Telecinco, lo que le permite estar más en contacto con su madre. Debido a su trabajo, Paz Padilla para poco en casa. Entre televisión y teatro, la humorista no tiene un hueco libre en su agenda.
Muchos creen que Paz ha enchufado a su hija en Telecinco para hacer prácticas. Sea como fuere, el caso es que la humorista, cuando Anna empezó su andadura como blogger, le recomendó que mantuviera un perfil bajo. De hecho, los links a sus vídeos costaba encontrarlos. Tal como se está produciendo, no es exagerado afirmar que a Anna le encantan las cámaras. Se la ve suelta y feliz. Tampoco le da vértigo la fama. Así las cosas, todo indica que cada vez tendrá más exposición. Algo que no parece vaya a hacerle demasiada gracia a Padilla que, aunque trabaja en Sálvame, ha proclamado en diferentes ocasiones su no querencia por la prensa del corazón.
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Terelu, una sufridora en casa
> Terelu Campos no está feliz con la decisión que ha tomado su hija. La colaboradora de Sálvame sabe que la sobreexposición se paga, y Alejandra está teniendo demasiada. En un principio, Terelu expresó que su hija quería mantener un perfil bajo. Sin embargo, el mundo de los influencers la deslumbró y optó por enrolarse en él. Estaba previsto que estudiara diseño de moda pero se bajó nada más matricularse. Dio un cambio radical que tiene muy preocupada a Terelu.
Alejandra Rubio tira en su canal de los miembros de la familia. María Teresa Campos ya ha participado en un capítulo y Terelu también ha tenido su cuota de protagonismo. La joven asegura que el próximo curso empezará Derecho al tiempo que cuenta que le encantaría ser la próxima Lara Álvarez. Está claro que las cámaras y la fama le tira. Mientras tanto, Terelu Campos sufre y guarda silencio. Sabe que su hija no escucha y también que nadie escarmienta en cabeza ajena.
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Paz Padilla, ganadora. Terelu, perdedora
> Paz y Terelu han corrido suertes dispares en lo profesional. Mientras que la gaditana ha dado el salto como presentadora, Campos se ha quedado en colaboradora rasa. Sin duda, algo sorprendente, dada la valía de una y la otra para comunicar. La humorista se lo pensó mucho cuando le ofrecieron presentar Sálvame. Fue Xavier Sardá quien le animó a aceptar la propuesta.
En los primeros tiempos en el programa, Paz se reunió en varias ocasiones con sus jefes para decirles que se iba. Consiguieron retenerla. Le costó mucho hacerse con los colaboradores, que eran hostiles a su presencia en plató. La sombra de Jorge Javier pesaba mucho y Padilla se equivocó en la forma de relacionarse con los colaboradores. Traspasó la línea y se puso a su altura. La raya que separa a la presentadora de la colaboradora se difuminó y Paz quedó en tierra de nadie y más sola que la una.
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El destino juega en contra de Terelu
> Terelu une a los problemas que tiene uno de gran calado. Su hermana ha decidido abandonar Sálvame. Como es de esperar, el chaparrón le va a caer a ella, que tendrá que responder todas las dudas que queden en al aíre. Es cierto que Carmen Borregó acudirá al programa para dar sus explicaciones. Sin embargo, tras su adiós, el chaparrón lo sufrirá Terelu.
No corren buenos tiempos para las Campos. María Teresa ha decidido rechazar la oferta de Canal Sur porque quiere ir a TVE con un programa de entrevistas. Está por ver si consigue su sueño. Carmen ha tocado fondo al darse cuenta de que el personaje se ha comido el rédito profesional cosechado durante años. En cuanto a Terelu, aguanta como puede pero no es feliz. Sabe que no cuentan con ella para presentar y que solo interesa por sus circunstancias personales.