Letizia es una de las reinas que más curiosidad despierta en todo el mundo. Incluso en Australia es la consorte real que más interés suscita. Hasta el Business Insider le ha dedicado un reportaje. Con un poco de interés, y bien asesorada, podría convertirse en la mejor embajadora de la moda española en todo el mundo. Doña Letizia está desaprovechando una oportunidad de oro para hacer valer su posición. Si el papel de la monarquía es meramente representativo debería defender la marca España, y no lo hace como debiera.
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Según el cronista real, Letizia no recibió a Máxima como merecía. «Dos reinas, dos estilos bien distintos. Y las comparaciones no aguantan», afirmaba, Peñafiel. Así, mientras la consorte de los Países Bajos eligió un espectacular traje de chaqueta con bisutería espectacular y guantes y pamela, Letizia la recibió con un vestido camisero muy de andar por casa. Como si pretendiera ridiculizar a una mujer que lo único que hace es intentar vestir a la altura del cargo que ocupa y representar a su país . No es el caso siempre de Letizia. A quien le ocurre lo mismo con los peinados. Nuestra Reina no sabe estar siempre a la altura.
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