Rania de Jordania es una de las mujeres más admiradas del planeta. Su estilo ha logrado cautivar a millones de seguidores. Desde siempre, la reina ha dado una gran importancia a su apariencia. Cuidarse está muy bien pero se convierte en un problema cuando la cosa muta en obsesión. Es lo que le ocurre a la esposa del rey Abdalá, que ha hecho del estar siempre perfecta su lema de vida. Idéntico proceder observa doña Letizia. Dos reinas y un destino.
4Letizia y Rania, coincidencias
La agenda de Rania está plagada de compromisos. Sin embargo, su trabajo queda opacado por lo que lleva puesto. En este punto, su destino corre paralelo al de doña Letizia. Ambas comparten una afición desmesurada a estar siempre perfectas, de ahí que no duden en pincharse la cara y lucir ropa y complementos de alta costura. De cuando en cuando, unos jeans y maquillaje nude para igualarse al resto de las millones de mujeres trabajadoras. El postureo no cuela y ambas reciben una catarata de críticas por su afición al lujo y la exclusividad. Pulsa sobre el botón SIGUIENTE y sigue leyendo.