La familia real atraviesa su momento más delicado. A las críticas que sufre la institución hay que sumarle las desavenencias entre sus miembros. Nada es lo que parece en un clan que se desangra en luchas internas. Doña Letizia y doña Sofía mantienen una inexistente cordialidad de cara a la galería. Mientras tanto, la infanta Elena ha vuelto a perder brillo mediático. Sin embargo, no piensa quedarse callada y mueve ficha.
9La metamorfosis de Letizia
Desde el momento en que Letizia Ortiz decidió unir su destino al del príncipe Felipe todo lo que había representado y sido hasta entonces quedó en el fondo del armario de la memoria. Tocaba un cambio de vida y había que empezar de nuevo. La periodista que se comportaba como cualquier otra mujer de su tiempo, desapareció. En su lugar, brotó una dama que adoptó usos y costumbres que jamás había practicado porque no iban con su forma de pensar.
El tema religioso está muy presente en la familia real. Doña Sofía se convirtió al catolicismo y, desde entonces, su relación con la iglesia ha sido muy estrecha. De hecho, este fin de semana ha estado presente en el Vaticano en el acto de canonización de Pablo VI y Oscar Romero. Una vez más, la reina emérita ejerce de representante de la familia real. A punto de llegar a los ochenta, la madre de don Felipe está en estupenda forma.