La realeza se mueve por parámetros diferentes a los establecidos para el resto de los mortales. Ingresar en el club de los royals tiene un precio en caso de divorcio. Es la cara B de una institución donde la trastienda permanece cerrada a cal y canto para que nadie pueda acceder a ella y conocer sus secretos. Doña Letizia estaba decidida a poner fin a su matrimonio con don Felipe. Sin embargo, algo lo impidió.
4El día en que la reina firmó lo que no debía
El día en que Letizia Ortiz firmó las capitulaciones matrimoniales no sintió nada especial. Tendrían que pasar algunos años para que ese episodio volviera a su mente. En 2013, la relación entre los príncipes hacía aguas. Atravesaban un fortísima crisis matrimonial que se hizo pública cuando ambos mostraron malestar en algunos actos. Quienes estuvieron cerca de la pareja en aquellos días recuerdan que se vivieron momentos de máxima tensión.
Doña Letizia planteó a don Felipe la posibilidad de separarse y eso hizo que saliera a colación el tema de la custodia de sus hijas. En caso de ruptura, Leonor y Sofía quedarían bajo la tutela de la Casa Real en la persona del rey. A la princesa se le recordó que solo tendría derecho a disfrutarlas en fines de semana alternos y periodos vacacionales.