Los miembros de la familia real viven tiempos revueltos. Cada vez están más alejados unos de otros. Cierto es que doña Sofía está poniendo toda la carne en el asador para ayudar a don Felipe a salvar la monarquía. De ahí que se multiplique porque sabe que su presencia suma a la causa. No obstante, a Letizia, ni agua. Es más, siempre que puede, se la devuelve, como ocurrió recientemente en la que ha sido considerada como la boda del año.
2Las buenas intenciones de don Juan Carlos
Lo sucedido en la pasada misa de Pascua, cuando doña Letizia evitó, hasta en tres ocasiones, que doña Sofía se fotografiara con Leonor y Sofía causó una gran conmoción. Nadie entendía como la reina propinaba semejante desaire a su suegra. Esto propició una ola de solidaridad hacia la reina emérita, quizás el miembro más querido de la familia real.
Don Juan Carlos se reunió con su hijo para aconsejarle que urgía tomar medidas para contrarrestar los efectos negativos del episodio palmesano. El rey emérito habló de la importancia de mostrar la imagen de familia unida. Para ello, se comprometió a estar presente en el veraneo real. Su intención, regatear y sumar a la causa de los Borbones.
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