Doña Sofía atraviesa un delicado momento. A nivel anímico, está muy tocada. Los últimos escándalos sucedidos en el seno de la familia real la han dejado hundida. La reina emérita no puede más. Otra vez don Juan Carlos la ha humillado públicamente. Las infantas Elena y Cristina le niegan el apoyo que necesita y Letizia sigue poniendo palitos en las ruedas. ¿Necesitará otra vez doña Sofía ayuda psicológica?
2Los desplantes de Juan Carlos a Sofía
Don Felipe ha intentado que su madre sufra lo menos posible con su nuevo rango. Sabe que para ella pasar de reina consorte a reina emérita no ha sido fácil. Doña Sofía siempre ha mantenido que los reyes no abdican, sino que mueren en su cama. Por tanto, lo sucedido ha sido algo con lo que no contaba. A ojos de los demás, puede parecer una liberación disfrutar de tiempo libre. Sin embargo, para la reina emérita no es fácil llenar el hueco porque eso permite pensar y la cabeza puede ser el mayor enemigo de uno mismo.
Durante años, doña Sofía ha estado volcada en el trabajo. Eso le ha permitido desconectar de la infelicidad marital. Hacer lo que más le gusta, ayudar a los demás, ha sido un bálsamo para el corazón de una mujer que se casó enamorada y ha sufrido el desamor. Lo peor de todo es que ha tenido que interpretar de cara a la galería una buena sintonía con don Juan Carlos que nunca existió. Existe constancia gráfica de los desplantes que su marido le ha hecho en público. Hasta ha llegado a apartarla bruscamente cuando iba a darle un beso.