La relación entre algunos de los miembros de la Casa Real y ciertos familiares es, cuanto menos, distante. Ayer día 17 de septiembre tuvo lugar el bautizo de Carlos, el hijo de María Zurita, quien llegó al mundo el pasado 28 de abril de manera prematura a los siete meses y medio de gestación. Un evento en el que, una vez más, quedó reflejada la brecha que existe en parte del entorno de la Familia Real, especialmente por parte de la reina Letizia.
El bautizo del pequeño Carlos se celebró ayer lunes por la tarde en la ermita del exclusivo Real Club Puerta de Hierro de Madrid, una finca de 200 hectáreas en la que la privacidad estuvo más que asegurada. Un acto en el que las ausencias por parte de los miembros de la Casa Real fueron numerosas.
5Un cóctel repleto de rostros conocidos
Tras el bautizo del pequeño Carlos, los asistentes pudieron disfrutar de un cóctel de pie. Tal y como ha informado María Eugenia Yagüe en el programa ‘Buenos Días Madrid‘ de Telemadrid, el rey Juan Carlos cogió una banqueta para sentarse con todo el mundo. Quien por su parte no pudo estar presente fue la infanta doña Pilar, quien se encuentra recuperándose de un fuerte constipado.
Tras el cóctel, alrededor de las diez de la noche, los asistentes disfrutaron en el restaurante del Club de una cena en la que no faltó el gazpacho y la merluza. Una celebración en la que los rostros de la mayoría de los miembros de la Familia Real brillaron por su ausencia.