Ha pasado mucho tiempo desde que vimos a Alonso Caparrós por última vez. Desde que decidió apartarse de la primera línea de fuego en Sálvame, poco o nada ha trascendido sobre él. Tampoco acerca del conflicto que mantenía -y que tal vez mantiene- con su familia. Las disputas con su padre, Andrés Caparrós, fueron debate y especulación en las tertulias televisivas. Con motivo de saber en qué punto se encuentra la relación con su hijo, el equipo de Cotilleo.es se puso en contacto con el presentador radiofónico.
Su respuesta hizo que encendiéramos todas las alarmas. Muy misterioso, sin intención de arrojar luz a las dudas que le planteamos, Andrés aseguró que, precisamente en ese instante, estaba en una comandancia de la Guardia Civil interponiendo una denuncia. ¿Contra quién o contra quiénes? El silencio se adueñó de la conversación que acabó interrumpida por el tintineo de la línea. Horas más tarde intentamos obtener la respuesta que nos sacara del atolladero, pero el mítico locutor esquivó, de nuevo, todas nuestras preguntas.
¿Ha ocurrido algo nuevo en la familia?
El misterio parece haberse adueñado del clan. A pesar de la brutal confesión de Andrés, lo cierto es que nada se sabe acerca de la relación actual que mantiene con su hijo. Tampoco si entre ellos ha existido la conversación que, ante las cámaras, aseguraban tener pendiente. Y es que las acusaciones rozaron lo delictivo. Alonso llegó a acusar a sus padres de haberse quedado con parte de su patrimonio económico y de haberle provocado más de un problema con las administraciones públicas.
En contra, Andrés incidió en la grave adicción de Alonso a los estupefacientes para justificar una relación que, sin duda alguna, se vio todavía más perjudicada por su participación en los programas de televisión: «Nos está matando en vida con tanta exhibición», llegó a decir Andrés, que también aceptó a sentarse junto a su hijo en la versión Deluxe de Sálvame para intentar empezar una nueva etapa de respeto y comprensión. Su gozo en un pozo. Nada se pudo hacer para forzar una reconciliación que ninguno de los dos pretendía. O tal parece a tenor del resultado catastrófico de la entrevista.