Desde que ocurriera el rifirrafe entre reinas, el posible divorcio entre don Felipe y doña Letizia ha sido objeto de especulación. Ciertamente, no parece que fuera fruto de la casualidad que las polémicas imágenes donde se ve a la reina evitando que su suegra se fotografiara con Leonor y Sofía llegaran a los medios. Raro, raro, raro. ¿Y después de la tormenta llegó la calma? Todo lo contrario.
9Divorciada pero no libre
La de doña Letizia no será ni mucho menos la vida de una alegre divorciada. Como madre de la heredera, debe ser ejemplar y parecerlo. Por tanto, si volviera a enamorarse, tendría complicado casarse. La suya sería una existencia de perfil bajo y solo aparecía en la foto oficial en caso de celebraciones relacionadas con sus hijas: bodas, bautizos, comuniones, graduaciones…
Al deja de pertenecer a la Familia Real, Letizia no tendría obligaciones de representación. En caso de que don Felipe necesitara acompañante para algún acto, esa misión recaería en su hermana Elena o bien en su madre. Aunque, visto lo visto, el Rey se desempeña muy bien solo. Desde muy joven, ha acudido a tomas de presidencia y otros actos de gran envergadura social para los que estaba aconsejado acudir acompañado y se ha desenvuelto muy bien en solitario.