La reina Letizia se ha cansado y está harta del perfil bajo que le toca observar tras los últimos escándalos que han sacudido a la familia real. La caída en desgracia de don Juan Carlos se ha convertido en un auténtico quebradero de cabeza para ella. En su caso, la venganza no tiene un sabor dulce. Te contamos el vía crucis que atraviesa doña Letizia el año en que los Borbones vivieron peligrosamente.
6Letizia se revuelve
Ante el tsunami Cornina, don Felipe ha tenido que dar un golpe en la mesa y dejar las cosas muy claras a la familia. A doña Letizia le toca observar un perfil bajo y no volver a sacar los pies del tiesto como ocurrió en el rifirrafe con su suegra en la última misa de Pascua. Por alguna razón, una parte de la sociedad no recibe bien que la reina, en ciertas ocasiones, parezca tener mayor protagonismo del que creen le corresponde.
Si algo tiene doña Letizia es que es una mujer de su tiempo. Ha sido criada para desarrollarse por sí misma y no para estar bajo el ala de nadie. Las nuevas medidas puestas en prácticas por don Felipe para salvar la monarquía conllevan un paso atrás que la reina no está dispuesta a aceptar. Con ella no va ejercer únicamente de consorte y madre abnegada. Quiere tener su espacio propio y desarrollarse junto a su marido pero con cierto margen de independencia.