La monarquía está en crisis desde que la voz de Corinna hablara de supuestas irregularidades de don Juan Carlos en el manejo de su patrimonio. La alemana acusa al rey emérito de manejarse entre testaferros, propiedades en paraísos fiscales y cuentas bancarias en Suiza. Como era de prever, el rey emérito ha sido apeado del veraneo real en Mallorca. Todo parecía bajo control hasta que doña Letizia ha vuelto a dar muestras de su fuerte carácter dejando claro que ella hace lo que le viene en gana.
7La venganza de Letizia
Doña Letizia ha mantenido un perfil bajo durante estos días en Mallorca. Ha estado a la sombra de don Felipe y hasta de su suegra. Ha dejado que sean ellos quienes lleven la voz cantante y se ha acoplado a la complicada situación que vive la monarquía. Es momento de hacer sacrificios y ella ha captado el mensaje. Hay que transmitir un mensaje, que la institución está viva y que el jefe es don Felipe. ¿Bicefalia? No, gracias.
Y sí, la reina Letizia ha cumplido con el guion escrito en palacio. Sin embargo, ha tenido que dejar su impronta al no acudir a ver a don Felipe regatear. Ni ella ni las infantas han ido a despedirle ni recibirle. Quien sí ha estado pendiente del rey en todo momento han sido doña Sofía y la infanta Elena, que han seguido la competición desde una lancha. Quizás haya sido la venganza de doña Letizia por tener que estar la primera semana de sus vacaciones en Palma y dando el callo. Menos mal que su sufrimiento acaba en unas horas. Entonces, ella, su marido y las infantitas pondrán rumbo a sus vacaciones privadas. Esas que pagamos todos pero de las que no tenemos derecho a ser informados.