Alejandra Rubio no para de sorprendernos en los cuatro meses que han pasado desde que cumpliese dieciocho años. Por un lado, se plantea una boda con su pareja, Álvaro Lobo. Además, el próximo mes de septiembre se adentrará en una nueva y sorprendente aventura profesional que, sin duda, dará mucho qué hablar… te lo contamos.
5Las consecuencias que sufre Alejandra por ser una «Campos»
La familia Campos no está para muchos imprevistos. Y menos ahora. María Teresa se encuentra en su momento bajo. Cada vez las cosas le van peor y no encuentra la manera de afrontarlas. El último «golpe» ha sido la reciente recaída de su hija Terelu, algo que ha llevado muy mal. Muchos han sido los nervios y la preocupación que ha tenido como madre, y más después de lo que le sucedió a ella el pasado año. Terelu tampoco está para muchas sorpresas. Al menos de momento.
Alejandra es la más joven de la generación de «Campos». A pesar de que no quiere ser un personaje público, lo es desde que nació. Es consciente de que su madre y su abuela son quienes son. Si bien la actitud de Andrea Janeiro es más que comprensible, el caso de Alejandra es totalmente diferente. Se expone mucho con las redes sociales y esto no le beneficia. No quiere que se hable de ella, pero lo pone bastante difícil para que así sea.
Un camino que no está siendo sólo de rosas. El hecho de ser «hija de» ha hecho que en muchas ocasiones el trato hacia ella sea diferente. Así lo confesó hace un tiempo en sus redes sociales. Afirmó, también, que algunas de sus antiguas amigas la envidiaban por pertenecer a la familia Campos. Ella, tajante, decidió eliminar a esas personas de su vida.