Los últimos escándalos protagonizados por miembros de la Casa Real han tenido un efecto muy negativo en la imagen de la monarquía. Este hecho obliga a hacer cambios. Todos deben acoplarse a la nueva situación y cumplir. Bien lo sabe doña Letizia, que ha tenido que ceder en cuanto a su manera de ejercer el cargo. Quería distanciarse totalmente del reinado de doña Sofía pero su sombra la persigue y ha conseguido atraparla.
12Suegro y nuera a la greña
Entre don Juan Carlos y doña Letizia jamás ha existido buena relación. El rey emérito la recibió muy fríamente cuando llegó a Zarzuela. El trato no mejoró con el paso de los años. Para don Juan Carlos, su hijo había hecho una mala elección. Era partidario de una mujer proveniente de la realeza porque así estaría preparada para el cometido que le estaba destinado.
Doña Letizia aguantó estoicamente los desplantes de su suegro hasta que se produjo una grave crisis matrimonial con don Felipe. Fue entonces cuando supo que don Juan Carlos había aconsejado a su hijo el divorcio. Se llevó un gran chasco y juró que eso era algo que no iba a olvidar. De hecho, en algunas ocasiones señaladas, se la ha devuelto no dejando asistir a ciertos eventos a sus hijas. Hablamos de actos de carácter marcadamente familiar.